Alexis Barreras: Colegas valoran su carrera en los medios

En la radio na­cional, la fi­gura de Alexis Barreras es una muy que­rida y admirada por sus colegas, quienes valoran su trayectoria como po­sitiva y exitosa. Esto es lo que han expresado ve­teranos locutores como Rubén Darío Aponte, Luis Ramón de los Santos, Nelson Brudis, Raphy D´ Óleo y Jennchy Suero, y algunos de labor más re­ciente como Alberto Ber­nabé “Bebeto”.

El andar en los medios de comunicación de barreras quien en la actualidad es encargado de producción de “Merensalsa”, por Domi­nicana FM, y coproductor de los programas “Punto y Coma” y “Los Merengues de Bebeto”, de Estudio 88.5 FM, entre otros, inició un adolescente. Barreras, quien en la actualidad es encargado de producción de “Merensalsa”, por Domi­nicana FM, y coproductor de los programas “Punto y Coma” y “Los Merengues de Bebeto”, de Estudio 88.5 FM, entre otros, inició un adolescente.

Eran los años ochenta y su tío, Rafael Corporán de los Santos, estaba al frente de una cadena de emisoras importantes en el país. Ahí estaba Nelson Brudis, quien fue uno de los que formó a Alexis en ese primer mo­mento. “Una de las razones por las que le di la opor­tunidad es porque le vi la pasión y el amor que te­nía por la radio”, recuerda Brudis, quien se siente or­gulloso de haber puesto su granito de arena en la for­mación de Barreras.

Luis Ramón de los San­tos rememora que una de las cosas que más le llama­ban la atención de Alexis, era que siendo apenas un adolescente tenía una gran insistencia por estar en la cabina de producción de Radio Popular. Sobre todo cuando De los Santos esta­ba seleccionando la músi­ca que iba a colocar en el programa “100 canciones y un millón de recuerdos”. agrega De los Santos.

Otro veterano de la ra­dio que le tiene un apre­cio especial es Rubén Darío Aponte. “Es un magnifi­co profesional, pero sobre­todo, lo trato como un hi­jo y el me trata como su padre”, explica, Aponte, quien forma parte del equi­po del programa sabati­no “Merensalsa”, y que es­te trabajo les ha permitido desarrollar una conexión especial ya que “se cono­cen las señas”.