Raphael como aquel día, digan lo que digan, en el corazón de los dominicanos

Tal y como reza su éxito de 1985, Raphael sigue siendo aquel, el mismo de siempre. Así lo demostró en su regreso a escenario dominicano con total éxito en el Teatro La Fiesta del Hotel Jaragua, donde cantó la noche del martes y tiene una nueva función este miércoles.

El artista español incluyó a la República Dominicana en su gira mundial “ReSinphónico 2019” para la cual se hizo acompañar de 59 músicos de la Orquesta Sinfónica Batuta.

Con una trayectoria de más de 57 años, Miguel Rafael Martos Sánchez, nombre de pila del artista oriundo de Linares, España, recogió 33 de sus éxitos y, demostrando cómo mantiene su calidad y fuerza vocal intacta, se los entregó a un público que lo ovacionó y coreó en cada oportunidad.

Durante más de dos horas, el intérprete de “Digan lo que digan” presentó canciones como “Infinitos bailes”, “Loco por cantar”, “Inmensidad”, “No vuelvas”, “Digan lo que digan”, “Mi gran noche” y “The wonder of you”, entre muchas otras a las que impregnó un toque electrónico, como sello de su último disco, que el público acogió.

Sin mediar muchas más palabras que las de sus conocidas canciones, Raphael agradecía entre reverencias y saludando con las manos mientras se paseaba por el escenario entonando cada pieza con la fuerza que le caracteriza.

Tras presentar 13 canciones, aprovechó “Volver” para dirigirse al público. “Esta es rara y antigua, de cuando en la radio ponían cosas buenas”, dijo.

“Cuando tú no estás” le sirvió para honrar de pie la orquesta, pero no fue hasta terminar “Estar enamorado” que la presentó. “Quisiera antes de continuar presentarles a la gran orquesta que me acompaña. La Orquesta Sinfónica Batuta”. Dijo y, solo acompañado de una guitarra, continuó con “Gracias a la vida” y “Que nadie sepa mi sufrir”.

Cuando llevaba 29 canciones, respondió a las peticiones de sus seguidores que pedían uno que otro tema. “Vendrán una por una. No desesperen. Por ejemplo, esta: Que Sabe Nadie”, agregó”, tema en el que aprovechó para convirtiese en el maestro de la orquesta.

Luego de repasar otros como “Yo soy aquel” (1966), “Escándalo” (1992) y “Como yo te amo” (1980), se despidió del público dominicano agradeciendo el apoyo constante y fiel a su trabajo y alcanzando una bandera dominicana que le regaló una seguidora, desapareció del escenario.

Sin embargo, no se resistió a la petición de otro tema de sus fanáticos y regresó para cantar, a capella, “A mi manera”.

Raphael se presentó en dos funciones en el Teatro La Fiesta del Hotel Jaragua bajo la producción por StarShows, del empresario artístico César Suárez Pizzano.