Familia

Rosa Annette la protegida de Mozart La Para

La situación de Rosa Annette Santos Cáceres cambió drásticamente luego de una decisión impulsiva, cuando el pasado 20 de marzo se trasladó desde San Cristóbal al Teatro Nacional Eduardo Brito a conocer a su artista favorito, Mozart La Para.

Esa noche la adolescente de 15 años se dirigió, desde San Cristóbal abordando un vehículo del transporte público, hacia el referido escenario, donde se desarrollaban los Premios Soberano. Su meta era abrazar a Mozart La Para y contra todo pronóstico cumplió su cometido.

A siete meses del acontecimiento que acaparó toda la atención de los medios de comunicación y redes sociales locales, Rosa Annette cuenta que varios aspectos dieron un giro en su vida, entre estos retomar sus estudios en el séptimo grado por medio de una beca. La menor llevaba un largo período sin recibir docencia debido a la precariedad económica que atraviesa su familia, viéndose obligada a trabajar.

Al publicar la historia sobre el encuentro entre la fanática y el artista, este se comprometió a ayudar a la joven y a su familia.

De las primeras ayudas recibidas por parte de Mozart La Para fueron los servicios odontológicos que el intérprete se responsabilizó a pagar, chequeos a los que Rosa Annette continúa asistiendo muy a menudo hasta concluir el procedimiento.

Listín Diario visita Al visitar su vivienda, en San Cristóbal, conversar con la adolescente y su madre, la señora Angie Cáceres, relataron lo que trajo consigo esta exposición mediática por la que fueron sometidas durante largas semanas, tras el encuentro y las promesas cumplidas por Mozart.

Rosa Annette relató que desde entonces ha mantenido un acercamiento con el cantante urbano y su esposa Alexandra, quienes les prometieron una vivienda, la cual no se ha podido construir debido a que la familia de Rosa Annette no cuenta con un terreno para la construcción de la casa.

“Alexandra es una mujer que tiene muchos compromisos, que nos ha ayudado bastante. Nos sentimos muy agradecidas con ellos; yo le digo a Rosa que no se desespere, que no es fácil encontrar un solar”, expresó la madre de Rosa.

Aunque esta familia resalta el lado positivo suscitado a partir del encuentro entre Rosa y Mozart, confesaron que sus vidas no han sido muy agradables, ya que a partir de ese momento comenzaron a originarse comentarios negativos en torno a sus personas, según dijeron queriendo dañar la reputación de la madre y la joven con especulaciones.

No tiene tranquilidad Rosa Annette reveló que no tiene tranquilidad debido a que algunas personas la asedian con preguntas constantes sobre el apoyo del artista. Además de las críticas recibidas por el hecho de que continúa con las ventas de chocolates en las calles, el cual ha sido su medio de subsistencia desde muy temprana edad. “Yo quiero que la gente entienda que Mozart y su esposa se ofrecieron a darme una ayuda, no tienen que mantenerme, yo debo continuar con mi vida normal”, puntualizó Rosa Annette.

Independientemente de los cambios, algo que permanece intacto en la vida de la adolescente es la profunda admiración que siente por el exponente urbano, ya que conserva las publicaciones de su historia, tiene una colección de cuadernos de Mozart y está muy al pendiente de cada publicación en sus redes sociales. Relata que no deja de escapar ningún detalle por insignificante que parezca.

El sueño DESEA SER ACTRIZ SU INSPIRACIÓN . Atraída por el bello mensaje de la canción de Mozart La Para “Levántate”, Rosa Annette se hizo fanática del cantante y quiso demostrarle su admiración yendo personalmente a la premiación en el Teatro Nacional, donde el artista recibió esa noche dos galardones, incluyendo por sexta ocasión el “Soberano del público”. La joven no tenía invitación, pero se las arregló para saltarse la verja de la Plaza de la Cultural y llegar hasta donde estaba su ídolo para abrazarlo y felicitarlo, así como para decirle que sus canciones la inspiran a seguir luchando por cambiar su condición de pobreza. Rosa Annette conserva sus deseos de convertirse en “una gran actriz”, cultivando el sueño de crecimiento a través de las historias de artistas que han surgido desde abajo, especialmente la de Erickson Fernández, nombre real de Mozart La Para.

Tags relacionados