Y ahora qué?

Buenos días queridos lectores. Esta semana les confieso que estoy consternada con el acto de terrorismo que pasó durante el fin de semana en Orlando,Florida; así como con los casos que han pasado en nuestro país donde la delincuencia se ha creído con el derecho de arrebatar vidas a sus víctimas.

La pregunta obligatoria es: ¿Qué nos pasa, hacia dónde vamos? Todos andan buscando la solución a estos problemas para evitar más de lo

mismo; yo le sigo apostando a la oración, a la conciencia, a la precaución y al poder de Dios, además de que las autoridades de cada país implementen las medidas que sean necesarias para acabar con todo esto.

Toca fortalecer la fe y asistir más a la iglesia, unirnos para protegernos y ser positivos para decretar lo que queremos que sea en vez de hablar de lo que ha pasado diciendo que las cosas se pondrán peores.

Yo creo que las cosas cambiarán a la medida de nuestro nivel de fe.

Cuando más oscura está la noche es justo cuando va a amanecer.