CONCIERTO
El VII Festival Musical inicia de buena forma
SANTO DOMINGO.- La séptima edición del Festival de Música de Santo Domingo se inició de la mejor manera. La actuación del tenor canadiense Ben Heppner, acompañado por la orquesta del festival, dirigida por el español Ramón Tebar, llenó de aplausos y gritos de ¡bravo! la repleta sala principal del Teatro Nacional Eduardo Brito, el pasado miércoles en la noche inaugural. Como cada dos años desde 1997, la cita con lo mejor de la música culta en nuestra ciudad llega de la mano del maestro francés Phillipe Entremont y la estrecha colaboración de la Fundación Sinfonía. Integrada por un grupo de músicos internacionales invitados y los miembros de la Orquesta Sinfónica Nacional, la noche inició puntual el viaje musical en el que la interpretación acertada de los instrumentistas y la belleza de las piezas escogidas dio como resultado una bella esperiencia estética a los asistentes al primer concierto del festival. El programa Incluyó las obras operísticas del romanticismo alemán y francés así como emblemáticas piezas de grandes maestros de la ópera italiana. El repertorio se desarrolló con las interpretaciones de las creaciones de Carl María Von Weber (“El cazador furtivo”, Overtura, Durch die W‰lder); Richard Wagner (“Lohengrin”, Preludio del acto III, In fernem Land, “Los maestros cantores de Nuremberg”, Preludio, Prieslied). A estos se añadieron las obras de compositores como Giacomo Puccini (“Manon Lescaut”, Intermezzo, La Fanciulla del West, Ch’ ella mi creda); Jules Massenet (“Le Cid”, “ souverain Ú juge Ú pËre); Pietro Mascagni (“Cavalleria Rusticana”, intermezzo); Ruggero Leoncavallo (“Pagliacci”, intermezzo) y Umberto Giordano (“Andrea ChËnier”, Come un bel dí di maggio. Un dí all’azzurro spazio). Ante los interminables aplausos del público, fue añadido a este repertorio al final del recital, el famoso “Nessun dorma”, aria del acto final de la ópera Turandot, de Giacomo Puccini y que tanto interpretó el fallecido tenor italiano Luciano Pavarotti. La actuación del tenor Ben Heppner arrancó más de un bravo de la emocionada audiencia que disfrutó de la voz potente, cuando hacía falta, y llena de dramatismo en los instantes en que la obra lo exigía, dando así los matices que llenaron todos los rincones de la sala. La orquesta fue dirigida por el español Ramón Tebar, quien desarrolla en la actualidad su segunda temporada con la Orquesta Sinfónica de Palm Beach y la ”pera de Cincinnati. Con gracia de movimientos a la hora de llevar la batuta, el joven director supo encaminar de manera natural la orquesta por los caminos que las obras exigían. El festival continúa el próximo sábado 7 con los violinistas Barna Kobori y Robert Davidovici; el lunes 9, Sebastian Knauer, piano; el miércoles 11, Phillippe Entremont, director y solista; el jueves 12, Doug Varone and Dancers; el sábado 14, Sophie Koch, mezzo. Todos estos conciertos serán dirigidos por el maestro Phillippe Entremont.