Lactancia materna: Desmontando algunos mitos

La leche materna es la fórmula ideal de aportar a infantes los nutrientes que se necesitan para un crecimiento y desarrollo saludable, esto según informes de la Organización Mundial de la Salud (OMS).

Recomienda la lactancia materna exclusiva durante los seis primeros meses, la introducción de alimentos apropiados para la edad de manera segura, a partir de entonces, y el mantenimiento de la lactancia materna hasta los dos años de vida o más.

Lo ideal es que todas las mujeres amamanten a sus hijos, siempre y cuando dispongan de buena información, del apoyo de su familia y del sistema de atención de salud.

Beneficios para el bebé Existen múltiples beneficios, tanto para la madre como para el bebé. En este caso, Yanet Olivares, cofundadora de la organización La Liga de la Leche en República Dominicana, cuya entidad apoya y acompaña a las madres en la alimentación de los infantes. Olivares asegura que la leche humana es la norma para los bebés. “Se podría hablar de riesgos de no amamantar, así como hablaríamos de riesgos de no respirar aire limpio”, reflexiona.

La pediatra-perinatologa, Mirtha Calderón, sostiene que uno de los principales beneficios es la parte afectiva, como un lazo que se establece entre madre e hijo, pues es inigualable y mejora el sistema inmunológico, manteniendo niños más sanos, en sentido general.

Calderón afirma que los recién nacidos amamantados tienen menos cólicos, menos alergias y problemas respiratorios a futuro.

Asimismo, Olivares asegura que, cada vez que el bebé mama se inmuniza. “La leche materna contiene anticuerpos que refuerzan su sistema inmunológico y lo protegen de enfermedades y condiciones crónicas”, resalta.

Este proceso, según especialistas, brinda más tiempo para disfrutar del bebé, facilita el vínculo entre ellos y el bebé huele dulce y agradable; aunque resulte increible para muchos.

Otro de los beneficios que detalló Olivares es que, la referida leche desarrolla el cerebro y sistema nervioso. “Los niños no amamantados muestran coeficientes intelectuales más bajos”, apunta.

Beneficios para el bebé Existen múltiples beneficios, tanto para la madre como para el bebé. En este caso, Yanet Olivares, cofundadora de la organización La Liga de la Leche en República Dominicana, cuya entidad apoya y acompaña a las madres en la alimentación de los infantes. Olivares asegura que la leche humana es la norma para los bebés. “Se podría hablar de riesgos de no amamantar, así como hablaríamos de riesgos de no respirar aire limpio”, reflexiona.

La pediatra-perinatologa, Mirtha Calderón, sostiene que uno de los principales beneficios es la parte afectiva, como un lazo que se establece entre madre e hijo, pues es inigualable y mejora el sistema inmunológico, manteniendo niños más sanos, en sentido general.

Calderón afirma que los recién nacidos amamantados tienen menos cólicos, menos alergias y problemas respiratorios a futuro.

Asimismo, Olivares asegura que, cada vez que el bebé mama se inmuniza. “La leche materna contiene anticuerpos que refuerzan su sistema inmunológico y lo protegen de enfermedades y condiciones crónicas”, resalta.

Este proceso, según especialistas, brinda más tiempo para disfrutar del bebé, facilita el vínculo entre ellos y el bebé huele dulce y agradable; aunque resulte increible para muchos.

Otro de los beneficios que detalló Olivares es que, la referida leche desarrolla el cerebro y sistema nervioso. “Los niños no amamantados muestran coeficientes intelectuales más bajos”, apunta. Beneficios para la madre

Amamantar es de esas acciones de doble beneficio. Además de proporcionar positivamente a los pequeños, también a la madre, debido a que, ayuda las hormonas de la lactancia y esto permite que las madres sientan y respondan de manera maternal al bebé, además de que puede producir una sensación de calma para ellas. Así lo aseguran varias madres entrevistadas por su experiencia y por recomendaciones de sus médicos.

Entre las ventajas están también, que pueden desarrollar la autoestima y confianza en sus habilidades para nutrir y proteger del riesgo de depresión posparto que presentan algunas madres.

Es por lo que Esther Rivas, una madre primeriza, ha optado por este medio de alimentación para su bebé. Para ella, la leche materna es el alimento más adecuado para las necesidades del bebé y está por encima de cualquier complemento de leche de fórmula.

Respondiendo al porqué es tan especial este alimento, explicó que, la leche materna varía según el momento del día, durante la propia toma y según va creciendo la criatura; adaptándose de la mejor forma posible a las necesidades del lactante en cada fase de su desarrollo. Lamentablemente se estima que muy pocas madres en este país les ofrecen a sus hijos leche materna como alimento exclusivo. Todos estos conocimientos los ha adquirido con la práctica y el tiempo que ha dedicado al convivir con su hija durante estos dos meses de su nacimiento, alimentándola solo con leche materna.

También expresó que, alimentar al bebé de manera tradicional comprende el favorecimiento de la hormona que facilita la contracción urinaria tras el parto, disminuye el sangrado, favorece el vínculo materno y existen menos riesgos de cáncer de mamá. Rivas asegura que, antes de decidir que esto sería la mejor forma a utilizar para alimentar a su bebé, realizó investigaciones e ingresó en un grupo de apoyo, para conocer todo sobre su nuevo camino como madre.

¿Hasta cuándo amamantar? Olivares y Calderón coinciden en que se debe amamantar por seis meses de manera exclusiva, sin agregar nada más, ni siquiera agua o té. Luego de transcurridos los seis meses se empiezan a ofrecer alimentos complementarios, tomando en cuenta a la criatura. La leche materna, junto a la alimentación complementaria se recomienda durante una edad mínima de dos años. A partir de ahí, es un asunto de la madre y el bebé, para decidir terminar esta relación de alimentación a través de la lactancia.

Mitos Existen muchas creencias falsas acerca de la lactancia materna, algunas de estas han sido dialogadas por Olivares. Sobre eso de que amamantar hace que se caigan los senos, dice que este es el más popular de los mitos y la realidad es que, no se caen los senos de la madre por esta razón. Otra es que, si se le da el seno de manera recostada, el bebé puede morir aplastado o se le va la leche a los pulmones; si se da seno a dos niños a la vez, se le debe asignar un seno a cada uno, para que el seno se ajuste a la edad y género, entre otros.

Yanet Olivares Cofundadora de La Liga de la Leche en RD "Respuesta sobre mitos de lactar” Debido a mitos como: tomar agua lactando, da al bebé ataque de epilepsia; a los prematuros hay que darles fórmulas, porque se cansan mamando; muchas de las madres no desean amamantar a sus bebés porque temen que les sucedan estos acontecimientos, que según los estudios de Olivares y Calderón, especialistas en leche materna y pediatría, respectivamente, destacan que, son falsas todas esas afirmaciones, que aún siguen entre las damas.