Abinader remueve la mata

Desde que el mundo es mundo y desde que el PRM es Gobierno había un montón de gente quejándose de Roberto Furcal. Primero por lo de las clases virtuales, luego de las clases presenciales, las transmisiones de televisión y radio y un larguísimo etcétera.

Pues Furcal es la pieza clave en los movimientos del presidente Abinader de anoche. Es la figura principal y el único ministro, hasta ahora.

Y lo de Furcal es interesante resaltarlo porque él es el gran armador político del PRM. Y de hecho, del proyecto presidencial de Luis Abinader.

Ha sido su jefe de campaña presidencial las dos veces que ha figurado en la boleta del PRM. De modo que aunque usted vea que lo mandan como ministro sin cartera no crea que lo están afueriando del todo del Gobierno. Recuerde que ya este gobierno tiene dos años y los ánimos pintan reelección, al menos en la intención.

Pero antes de eso habrá que preguntarse: Furcal sale de Educación en buenos términos con el presidente o con el jociquito parado porque le sacaron los pies. De la respuesta pueden depender muchas cosas. Incluyendo parte del futuro político del PRM. Y el de muchos futuros de candidatos a puestos electivos.

Otro de los movimientos de Abinader ha sido Hugo Beras, que lleva una rapidísima cadena de asensos en la política y en la administración pública dominicana.

Hugo pasó de hacer chistes más malos que los que hacemos aquí a un programa de radio, a director de comunicaciones de Cancillería, a candidato a alcalde del PRD y luego a secretario general del Ayuntamiento del Distrito Nacional. Y desde ahí al Gabinete de Transporte.

Es el gran inventor y ejecutor de los cambios de vías en el Distrito Nacional. Ahora lo ponen en el Intrant, donde había quejas porque era dirigida por dirigente de Conatra.

Abinader se llevó al director de Migración Enrique García, el hombre que no quería saber de los haitianos ni en pinturas. Ahí puso a Venancio Alcántara Valdez.

Otro que ya no está en Bienes Nacionales es César Cedeño, la mano derecha y armador político de Hipólito Mejía. Que con lo pegado que está Hipólito seguro que a don César lo ubican en otro sitio.

Dice los que viven por los pasillos del Palacio que los cambios no se han acabado. Que restan unos cuantos entre hoy y la semana que viene.

También dicen que a Fulcar le ofrecieron un consulado y dijo que no.

A todo esto es bueno resaltar que este Gobierno todavía no tiene dos años. O sea que…