Falcón: La droga y los políticos
Señoras y señores, el lavado de dinero sigue ensuciando gente. Bueno, en realidad ellos se ensucian solitos.
Beben champán mientras se ensucian; contratan megadivas mientras se ensucian; mencionan a legisladores mientras se ensucian…
Lo bueno, aunque dudo que sea realmente bueno, es que ya no solo a los Pedros y Juanes de los barrios, a los que estábamos acostumbrados con las redadas de la DNCD. Ahora hablamos de políticos, de los de cuello blanco.
Y de una red que a simple vista parece la más importante de toda la historia del país.
La Procuraduría, la DNCD y los gringos con la DEA desarticularon una supuesta banda que desde el 2012 se dedicaba al tráfico de al menos 2,500 kilos de cocaína a la semana, acumulando inversiones del lavado de activos por al menos 10,000 millones de pesos.
¡Unos 500 millones de dólares! Hasta un equipo de beisbol podían comprar.
A esta gente, que hasta el momento suman más de 20 los detenidos, se les decomisó 100 vehículos, más de 20 relojes de lujo y 4.3 millones de dólares en efectivo.
Y lo ridículos que se ven las autoridades celebrando cuando decomisan mil kilos de cocaína… jajaja. Y nosotros publicándolos asombrados, ¡qué buen trabajo! Y esta gente metiéndonos 2,500 semanales.
Lo peor no es que los dominicanos estén vinculados a una red de narcotráfico, lo malo de todo esto es que los que se dedican al negocio de las drogas se están metiendo de lleno en la política y a simple vista los partidos no hacen nada para evitarlo. Y ley de partidos que no ayuda… bueno, que no sirve para nada.
Para que ustedes tengan una idea… cada candidato, cada partido político, debe entregarle a la JCE un listado de quiénes les donan dinero. Cuánto gastan y en qué lo hicieron. En teoría la JCE debe recibir esos documentos y analizarlos, estudiarlos, y ver si hay cosas extrañas.
¿Y ustedes saben qué hizo la JCE con esos papeles? Jajaja, lo mismo que hace la Dirección de Migración con los papelitos que uno llena al llegar al país. NADA.
El caso de la Operación Falcón es medio extraño. Hay funcionarios importantes y legisladores mencionados. Lo que no sabemos muy bien es si son narco políticos o políticos que se engancharon al narcotráfico. O a lo mejor las dos cosas al mismo tiempo. Y viceversa.
El nombre más sonoro en la vida política, hasta el momento, es el de Juan Maldonado Castro, mejor conocido con “Marcial” o “El Líder”. Este hombre era hasta su arresto director de Comunidad Digna, o sea funcionario público de los que nombra el presidente con un decreto. Y con otro decreto lo mandaron a volar, bueno, a los pies de la justicia independiente: lo suspendieron y en un par de semanas viene su cancelación, siéntese a esperar.
Esta historia del arresto de Maldonado es muy interesante. Hasta risa da: Según el diputado del PRD (¿y al PRD le quedan diputados? Yo pensaba que ahí nada más quedaban Miguel Vargas, Víctor Gómez y Fiquito). Pero bueno, que el diputado, Héctor Féliz Féliz, mejor conocido como Pirrin, quien acompañaba a Juan Maldonado al momento del arresto, dice que ambos son amigos y el exdirector de Comunidad Digna le pidió una bola, hicieron una diligencia política, siendo ambos de dos partidos distintos y para ayudarlos digamos que le cogió la noche juntos, la noche pero tarde.
Le pidió una bola y los detuvieron de madrugada.
Dicen los fiscales que cuando los tipos se dieron cuenta que los estaban buscando emprendieron la huida. Pero que ellos, las autoridades, raudos y veloces, los detuvieron.
La acusación principal que le hacen al diputado es que, supuestamente, estaba ayudando a escapar al director de Comunidad Digna.
En el vehículo del diputado habían relojes Roger Dubuis, Cartier, Hublot, Graham, Rolex, cadenas de oro, crucifijos de oro, celulares de diferentes marcas, carteras, una pistola y ni un peso en efectivo. Por eso es que dicen que los diputados nunca andan con un peso arriba, porque cargan otras cosas.
Parecía una joyería el carro del diputado.
Otro legislador que también es señalado en el expediente de medida de coerción es Nelson Marmolejos Gil, del PRM, a quien supuestamente Erick Randhiel Mosquea Polanco, “El Loco”, “Chiquito” o “el Hombre”, pero y estos apodos… bueno que ese señor le financió toda su campaña política.
“El Loco”es señalado como uno de los cabecillas de la red y ya fue atrapado en 2016 en Puerto Rico, junto a otros que también están señalados en este caso con 1,786 kilogramos.
En fin, el diputado llamaba a los narcos y les agradecía sus aportes a su campaña según los fiscales.
El Ministerio Público ha dicho que como estos diputados tienen inmunidad parlamentaria, no puede apresarlos, y que le pedirá a la Suprema Corte de Justicia la designación de un juez especial para que investigue los supuestos nexos de legisladores con el caso de narcotráfico y lavado de activos.
José Alejandro de la Cruz Morales Omar, La Moña, es señalado como otro de los cabecillas de esta red y andaba junto a Erick Randhiel Mosquea por allá por el 2016 cuando fueron detenidos por los gringos en Puerto Rico.
A la lista le siguen María Olimpia Tavares Rodríguez, conocida como Oli y La Princesa, fue condenada en 2013 por transparentar cerca de RD$100 millones en una red de lavado de activos internacional que dirigía su pareja sentimental en ese entonces, el colombiano Huber Oswaldo Buitrago Ruiz, condenado en 2016 por la misma acción.
Mientras tanto Juan José de la Cruz Morales, señalado como jefe operativo de la banda, pidió irse a los Estados Unidos para enfrentar su acusación de narco y lavador. Ese ni lo pensó mucho. Y las autoridades están buscando a otros 6 que están prófugos. Con alerta de que andan armados y peligrosos, así que cuidado.
Dos cosas les digo y me voy: anoten por ahí que a todo el que Estados Unidos pida en extradición aceptará irse voluntariamente, sin poner medio pero. Y que allá hablará o cantará más claro que Girón aquí.
Y lo segundo es que todos esos que se vayan estarán aquí de vuelta en 10 años. O en menos tiempo. Y con mucho dinero.
Para prueba, pregúntenle a Quirino. Bueno, a Don Quirino, como le decía Salvador Holguín.