Adrián Beltré, su vida luego de Cooperstown

Transcurridos este domingo los cinco años que sellan una brillante carrera, Adrián Beltré no espera guardar para si todo el talento exhibido y demostrado, los niños que aspiran a convertirse en beisbolista tendrán en él a uno de sus más genuinos mentores.

Esto forma parte de la vida que espera tener el nuevo inmortal dominicano, tras su exaltación este domingo en la inmortalidad de Cooperstown.

Claro, el miembro de cuatro equipos en una carrera que se extendió por 21 años, aspira devolver a su familia todo el tiempo que le robó mientras se convertía en uno de los más brillantes antesalistas de todos los tiempos.

“Los niños dominicanos tendrán en mi a uno de sus mentores, eso es algo que me encantaría realizar ayudar a desarrollar otros talentos”, expuso el exjugador tras un encuentro con periodistas en uno de los salones de actos en el Clark Sports Center.

Ya viendo materializado lo que representó su inclusión en Cooperstown, Beltré piensa festejar en grande, pero en una actividad privada, con sus familiares y algunos amigos.

“Ya anhelo que culmine este día, espero descansar un poco y mantener mucho más tiempo con la familia, en el pasado le robé mucho, ahora es tiempo de devolvérselo”, sostuvo.

En ese sentido, dijo que al menos por ahora no le interesa mezclarse en el béisbol, el cualquiera de las funciones, coach, gerencia, pues entiende que estaría en lo mismo.

Su discurso

De poco hablar en público, Beltré dijo que su discurso pudiera ser de unos 15 o 20 minutos, el mismo sería una mezcla de un 60 por ciento en ingles y el restante en español.

“Tuve una carrera muy extensa y he trabajado en resumirla lo más que pueda”, expresó el exjugador.

Pedro Martínez fue de los primeros que se comunicó con el cuando recibió la llamada de la inmortalidad. También citó a Pablo Peguero y Rafael Avila como dos de las principales personas que confiaron en su persona, así como algunos instructores de las Menores.

Otro de los Vigilantes

Beltré se convierte en el noveno pelotero que al menos ha jugado con los Vigilantes y hoy figura en Cooperstown. El se une a Nolan Ryan e Ivan Rodríguez como los únicos miembros de ese conjunto en ingresar a la inmortalidad exhibiendo la gorra de los Vigilantes.

“Quiero agradecer de manera infinita a todos los fanáticos, quienes hicieron mi carrera mucho más confortable y pude brindar lo mejor de mi talento en cada una de mis paradas”, expresó el hoy inmortal.

“Me acogieron como uno de ellos y gracias a Dios que pude corresponderle con buenos ocho años”, señala el dominicano, quien durante su carrera bateó para .286 con 477 jonrones, 1,707 remolcadas, además de 636 dobletes.

Sus 3.166 imparables lo ranquean en el puesto 18 entre los 33 peloteros en ser miembro del club de 3,000 hits.

David Ortiz se

lleva mayores aplauso

Aún con tener ocho años en el retiro, sin haber exhibido destellos de ser luminaria en la defensa, el cariño y aprecio por David Ortiz se sintió en grande durante la parada de los inmortales, celebrada este sábado y que forma parte del fin de semana de Cooperstown.

En un paseo de las grandes leyendas del béisbol vivientes por la Main Street Avenue, de este poblado, el Big Papi se llevó los mayores aplausos durante el desfile en que unos 4,000 asistentes presenciaron en “carne propia” a los héroes, quienes durante su carreras les hicieron amar cada día más al béisbol.