El atletismo en crisis
Pasión por el atletismo: motivación de los deportistas por encima de la precariedad
Deterioro, basura en los alrededores, huecos, gallinas y un gimnasio en mal estado, son algunas de las situaciones que se perciben en la pista de calentamiento del Centro Olímpico “Juan Pablo Duarte”.
Con el transcurso de los años, el atletismo se ha convertido en uno de los deportes más importantes de República Dominicana, pues a través de este diferentes atletas han colocado el nombre del país en alto.
Marileidy Paulino resalta entre las figuras deportivas por haber sido la primera mujer dominicana en ganar al menos dos medallas de plata, una de ellas en los Juegos Olímpicos de Tokio 2020, en la prueba de los 400 metros.
En el caso de Fiordaliza Cofil, obtuvo su primer triunfo con la medalla de oro en Oregón 2022, de relevos mixtos 4x400 metros.
Así como Marileidy y Fiordaliza muchas otras promesas del atletismo comparten el sueño y pasión por ese deporte, sin embargo, una de las dificultades que tienen en común es la pésima condición de la pista de calentamiento de atletismo del Centro Olímpico “Juan Pablo Duarte”, un espacio que, poco a poco, va destruyendo los bocetos de aquellas metas.
Es importante resaltar que los atletas tienen a su disposición dos pistas, una de calentamiento y la otra para las competencias (el estadio Félix Sánchez), la cual es frecuentemente utilizada para conciertos de artistas nacionales e internacionales, así como otros eventos de participación masiva.
Abandono, deterioro, basura en los alrededores, huecos, gallinas y un gimnasio en mal estado, son algunas de las situaciones que se perciben en la pista de calentamiento del centro y, cada una, a su modo, representa una amenaza para las prácticas diarias.
Las instalaciones de la pista se iniciaron en el año 2002 y finalizaron en el 2003; desde ese momento hasta la actualidad, se mantienen los “elementos con los que fue preparada para los Juegos Panamericanos de ese año”, según indicaciones de Freddy Montero, entrenador desde 2012 en paratletísmo, una adaptación del atletismo para personas con discapacidad.
Para inicios del año en curso, surgieron noticias sobre el posible remozamiento de la pista, alegando que se contaba con recursos económicos para comenzar la reparación. Pero, los mismos atletas aseguran que hace poco tiempo se empezaron los trabajos.
“Se supone que van a levantar el material de la pista para poner uno nuevo, y esas son solo especulaciones, porque no hay una propuesta en específico de lo que se hará”, agregó Montero.
Realidad de los atletas
Son evidentes las adversidades e innumerables las veces que se han hecho denuncias, y “es poco el apoyo que han recibido de las autoridades”, tanto del Ministerio de Deportes, como de la Federación Dominicana de Atletismo, detallan los deportistas.
Asimismo, las denuncias giran en torno a la baja calidad de la pista de entrenamiento, que constantemente los lesiona y limita. “Nos sentimos muy incómodos, estas instalaciones no están aptas ni para atletas, ni para caballos. Estamos propensos a lesionarnos”, expresó Ferdy Agramonte, corredor que lleva aproximadamente nueve años en el deporte.
Además, agregó: “Marileidy entrenaba aquí, pero ahora se ha quedado en las pistas internacionales para tener una mejor preparación. Nosotros no tenemos la misma posibilidad y tenemos que adaptarnos a lo que tenemos aquí”.
Un aspecto que no se puede pasar por alto es que la pista de calentamiento se encuentra en vulnerabilidad. Los corredores describen que “se roban las máquinas o las venden”, porque la pista es un espacio público.
Paralímpicos
Jóvenes con distintas discapacidades son los que diariamente se reúnen en la pista para prepararse y llegar a las competencias internacionales, con Freddy Montero como su entrenador.
“Vamos a una competencia de alto nivel el mes que viene, pero no podemos aplicar la carga a los atletas, porque, si lo hacemos en las condiciones en las que está la pista, se lesionan”, destacó Montero.
También describe que los atletas paralímpicos se han visto en la necesidad de “salir de Santo Domingo a terminar el entrenamiento”.
Wagner Astacio es uno de los corredores que, a pesar de tener solo una pierna, lleva al menos ocho meses entrenando y, ha visto “poco apoyo de las autoridades”.
Lesiones
Uno de los obstáculos más frecuentes dentro de la pista son las lesiones que sufren los corredores por la condición en la que se encuentra el espacio de entrenamiento, donde “hasta con pisar las personas se lesionan”.
“Vivimos en la situación de las lesiones casi a diario y por la condición de la pista lo más fácil es que un atleta se doble un tobillo y más si se está trabajando con atletas que tienen algún tipo de discapacidad”, dijo el entrenador Montero.
“Las lesiones más frecuentes son en cuádriceps y cuando tratamos alguna, a la semana aparece otro dolor”, fue otra de las declaraciones de Agramonte.
Viviendas
“Un esfuerzo sobrenatural” es el que realizan los deportistas que se alojan al lado de la pista de calentamiento, porque no pueden quedarse en las villas olímpicas.
En el espacio conviven algunas 10 personas, cuyo sustento son los ingresos que generan trabajando como atletas militares. De igual manera, destacan que son “sobrevivientes”, puesto que solo les dan la comida inapropiada y deben soportar todo por necesidad.
Pasión por el deporte
Muchas veces se desestima la cantidad de sacrificios de un atleta para cumplir sus sueños y más cuando no recibe el apoyo suficiente por parte de las autoridades.
La decisión de abandonar a sus familiares cuando no viven en la ciudad, pasar hambre y no tener pasaje para trasladarse a pistas en mejores condiciones, son solo algunas de las adversidades que forman parte del día a día de gran parte de estos deportistas, quienes son capaces de hacerlo todo gracias a su pasión por el atletismo.
Una de las frases que más repiten es “gracias a mi entrenador”, ya que a menudo son los que notan el potencial de los jóvenes y mueven cielo y tierra con tal de brindarles lo que necesitan y ayudarlos a que logren sus metas.
Fiordaliza Cofil, a pesar de haber alcanzado múltiples logros en el atletismo, destacó que, en muchas ocasiones, ha pasado hambre y, junto a sus compañeros, sobreviven ayudándose unos a otros.
Asimismo, lo que ha obtenido hasta el momento se debe en gran parte a su entrenador, quien le ha extendido la mano hasta con el gimnasio, ya que el del Centro Olímpico no está en buenas condiciones.
“Lo hacemos por los deseos de progresar, de representar el país y porque nos encanta lo que hacemos. Todo es por amor, si no fuera así, lo hubiese dejado porque no nos dan la posibilidad de mejorar”, afirmó Cofil.
Otro caso es el de Wagner, un paratleta que hoy en día puede practicar por sus dos entrenadores, quienes notaron su potencial y decidieron traerlo a vivir a Santo Domingo para que tuviera mejores oportunidades.
“Yo tuve dos personas que me tendieron la mano, mis dos entrenadores. Ellos me sacaron de mi campo y me están ayudando. Yo, por la Federación y por el gobierno no he recibido casi nada, pero los entrenadores míos están al 100 por ciento conmigo”, explicó Astacio.
Por su parte, Emilio Gavilán es uno de los tantos jóvenes que debe utilizar la vivienda que ofrece el Estado en el mismo Centro Olímpico. Este tuvo que dejar su vida en Cotuí, así como a su familia, la cual casi no puede ver por vivir lejos.
“Nosotros somos sobrevivientes para poder lograr lo que queremos”, fueron sus palabras para definir la fuerza de voluntad para ir detrás de lo que aspiran.
Conformidad ante las limitaciones
Al conversar sobre lo que esperan de la pista de calentamiento, se notó que los atletas están algo resignados con que realmente ocurra un cambio, ya que aseguran que las malas condiciones del espacio han permanecido así durante años.
De igual forma, todos coincidieron en que los arreglos que se han hecho al terreno, al poco tiempo, volverán a como estaban antes y es más “la lucha que se pasa, que los beneficios que se puedan obtener”.
“Uno se conforma hasta con la pista y el gimnasio”, “por lo menos me gustaría que se arreglara donde uno corre” y “quisiera que las autoridades pusieran algo de empeño en la pista”, fueron algunos de sus deseos, entre los cuales es importante resaltar que, ante las limitaciones, los corredores han llegado a un punto que se conforman con “lo que aparezca”.
“Tienen más de dos años diciendo que se van a arreglar las pistas, pero todo el tiempo están con cuentos; ahora van a poner algunas personas a despegar el material y cuando viene a ver duran 20 años quitando eso. Si no rompen todo, no tendremos una pista de calidad”, aseguró el atleta Ferdy.