BÉISBOL

Salas, un catcher especial que tendría bono US$5.0 MM

Ethan Salas es un venezolano que posee herramientas envidiables y procede de una familia de peloteros.

Ethan Salas es un venezolano que posee herramientas envidiables y procede de una familia de peloteros.

El próximo domingo, 15 de enero, se subirá el telón para dar inicio al mercado de firmas internacionales, un escenario donde un nombre en específico se adueñará de los principales titulares alrededor del mundo: el receptor venezolano Ethan Salas.

El novel portento, aunque nacido en Caracas, ha sido producto del sistema de academias dominicanas, específicamente de la Academia La Javilla, donde pasó sus dos últimos años de la mano de Alberto Castillo y José Antonio Salas, su padre, como entrenadores.

“Emocionado de esta fecha especial, el inicio de la carrera de nuestro hijo del medio, Ethan Salas, receptor de buenas cualidades defensivas con bate zurdo, que promete altos promedios, buenos porcentajes de embasado y un poder proyectado a futuro”, detalla José Antonio a Listín Diario sobre la alegría que crea la firma de su hijo y las características del mismo.

Ethan, quien se prepara formalmente como careta desde los seis años de edad, ha sido un talento por encima de su clase en todo momento, llegando hasta el punto de debutar en la Liga Venezolana de Béisbol Profesional (LVBP) con las Águilas del Zulia, cuando ni siquiera su contrato para participar en el béisbol organizado se hace oficial.

“El pelotero que se prepara tan bien como Ethan nos lleva y nos obliga a hacer cosas que normalmente no haríamos con ningún menor de edad”, explica su padre acerca del debut de este en un circuito donde en promedio los jugadores superan su edad por casi 13 años.

Herencia La familia Salas carga con el béisbol en su ADN, empezando por José Antonio, un exreceptor de Ligas Menores durante la década de los noventa para los Bravos de Atlanta, quien además participó con los Tiburones de La Guaira y Leones del Caracas en su país natal, manteniéndose en condición de coach de bateo para Águilas de Zulia y la propia Academia La Javilla.

Esta tradición es continuada por José, el mayor de sus descendientes, reluciente paracorto que pertenece a los Marlins de Miami, ubicado como el quinto mejor prospecto de la franquicia, de acuerdo con MLB Pipeline.