DILEMA
Partidos en estadios vacíos, un plan no tan sencillo frente a la pandemia
Pronto será visto con normalidad: un frío y frecuentemente inquietante espectáculo al que el fútbol y muchos otros deportes tendrán que acostumbrarse para los próximos meses.
Realizar partidos sin aficionados
¿Pero estarán realmente vacíos estos estadios? Para nada.
“No se trata de 22 jugadores en una cancha y (pateando) un balón”, dijo el vicepresidente de la FIFA, Victor Montagliani, a The Associated Press en referencia a lo que llamó el “enfoque progresivo” que el fútbol —y la sociedad en general— deberá asumir para volver a la normalidad después de la pandemia del nuevo coronavirus.
Algunos clubes en Europa han vivido la experiencia de tener partidos sin el estruendo de sus aficionados —ya sea al cumplir una sanción por mala conducta de los hinchas o, como fue el caso en febrero y marzo, debido a la creciente propagación del virus.
Ahora prácticamente todos los equipos estarán planeando tal escenario al tiempo que las ligas empiecen a iniciar sus preparativos para su reanudación de actividades —que dependerá de las medidas que cada país ha impuesto para frenar el brote de la enfermedad.
Entre las principales ligas de Europa, Alemania es la que luce más próxima a levantar sus suspensiones, e incluso algunos gobernadores estatales esperan reanudar los partidos el 9 de mayo. La Bundesliga planea aceptar un máximo de 213 personas en el estadio —contando jugadores y camarógrafos para la televisión.
En Gran Bretaña, que se encuentra en el punto máximo de contagios de COVID-19, se evalúa el regreso para finales de junio —si bien resulta demasiado optimista— para los clubes de la Liga Premier. Un funcionario de un club habló sobre la necesidad de disputar juegos ante al menos 300 personas.
En Suecia, donde las autoridades del fútbol planean un reinicio de juegos para el 14 de junio, un funcionario de la sede del campeón Djurgarden dijo a la AP que sería posible limitar ese número a 50 personas en caso que los aficionados no tengan permitido el ingreso a los estadios. En Suiza, los planes revelados por el diario Blick esta semana subrayan que no deberá haber más de 200 miembros esenciales del personal en los partidos.
Mucho depende de la forma en que las directrices de los gobiernos y la demanda de las difusoras nacionales e internacionales, de cuyo dinero los clubes dependen cada vez más.
DENTRO DE LOS ESTADIOS
Futbolistas y árbitros obviamente están en la lista. Los planteles para los partidos están conformados por 18 a 20 jugadores en las principales ligas de Europa, y se necesitará contar con refuerzos en caso de retiros de último minuto. Se debe contar con un grupo de cuatro árbitros (el árbitro central, dos abanderados y un cuarto oficial), al igual que el árbitro suplente.
Luego está el cuerpo técnico —entrenadores, asistentes, preparadores físicos, fisioterapeutas y el médico del club.
Entre el resto del personal esencial se cuenta con un delegado de partido, un funcionario antidopaje, fotógrafos y personal de transmisión (como ingenieros de sonido, técnicos, camarógrafos y productores), al igual que personal médico. En Inglaterra, por ejemplo, se requieren cuatro paramédicos y un conductor de ambulancia durante todo el partido.
FUERA DEL ESTADIO
Los encuentros podrían atraer a las multitudes aunque los espectadores no puedan ocupar las tribunas.
Miles de aficionados se congregaron en el exterior del Parc des Princes para festejar el triunfo del Paris Saint-Germain sobre el Borussia Dortmund en la Liga de Campeones el 11 de marzo, y los aficionados convivieron sin respetar el distanciamiento social. Los jugadores incluso fueron a festejar con ellos.
Algunos funcionarios públicos han manifestado su preocupación de que la gente se reúna para seguir los partidos por televisión. El técnico del Liverpool, Jürgen Klopp, hizo comentarios similares antes del confinamiento.
ANTES Y DESPUÉS DE LOS PARTIDOS
También surge la pregunta de qué hacen los jugadores una vez que abandonan el estadio.
Alemania está proponiendo realizar pruebas en coronavirus a los jugadores antes de cada partido, algo que podría ser recibir críticas públicas. La liga detalló que usaría “menos del 0,5%” de la capacidad de pruebas a nivel nacional, pero aun así eso representaría miles de pruebas para completar a temporada