Nadal y España resucitan para alcanzar semis de la Copa ATP

Rafael Nadal perdió un partido de individuales por apenas segunda vez desde julio, y quedó a dos puntos de otra derrota instantes después que hubiera dejado fuera a España en la Copa ATP.

Pero luego de perder 6-4, 7-6 (3) ante David Goffin en sencillos el viernes, el número uno del mundo hizo dupla con Pablo Carreño Busta en el duelo decisivo de dobles ante Bélgica, uno que se definió en un desempate. La victoria, concretada pasada las 1 de la madrugada en Sydney, instaló a los flamantes campeones de la Copa Davis en una semifinal ante el anfitrión Australia.

“David jugó un gran partido. Fue superior. Yo he sufrido mucho físicamente. Mucha humedad”, declaró Nadal. “Pero al mismo tiempo se justifica decir que estábamos en la peor situación para estos cuartos de final porque nos tocó viajar desde Perth. Hay un cambio de tres horas, condiciones climáticas distintas, para enfrentar a un equipo que lleva 10 días aquí”.

“Y tuvimos condiciones muy pesadas hoy, estábamos en la peor situación para disputar esta serie. Estamos súper felices de poder haber avanzado en las semifinales, y mañana será otro día”, añadió.

A primera hora, Novak Djokovic tuvo a casi todo el público en la arena Ken Rosewell de su lado, y demostró lo buen anfitrión que es con sus invitados.

Su partido de cuartos de final contra el canadiense Denis Shapovalov se paró al final del tercer set cuando un espectador necesitó atención médica, y Djokovic, que tenía un 0-30 en contra y sacaba para ganar el partido, tomó una botella de agua, fue la grada y pidió a la multitud que la pasara.

En la reanudación consiguió nivelar la pizarra 30-30, pero Shapovalov le ganó el saque para empatar el set 5-5. El canadiense salvó un punto de quiebre en el siguiente game, pero el partido se fue al tie break tras dos horas y media de juego. El serbio asumió entonces las riendas y ganó los cinco primeros puntos para completar su remontada por 4-6, 6-1, 7-6 (4).

Dusan Lajovic superó a Felix Auger-Aliassime 6-4, 6-2 antes en el día, por lo que Djokovic aseguró el boleto de Serbia a las semifinales, donde se medirá a Rusia, antes de la disputa de los dobles, donde se completó su barrida 3-0.

“Fue muy ajustado, podría haber salido de forma diferente muy fácilmente. (Shapovalov) estaba jugando un tenis excelente”, dijo Djokovic. “Sentí, en todo momento, que estaba jugando totalmente en casa”.

La sesión nocturna fue intensa hasta el final.

Roberto Bautista Agut adelantó 1-0 a España al prolongar su seguidilla de victorias por sets corridos al vencer 6-1, 6-4 a Kimmer Coppejans, quien de último momento entró a jugar por el capitán belga Steve Darcis.

Nadal no cedió un solo set en sus tres partidos de sencillos en Perth por fase de grupos de la nueva competición internacional de equipos, pero no pudo quebrarle el saque en ninguna oportunidad al agresivo Goffin en Sydney.

El astro español evidenció cansancio en individuales y en la pulseada de dobles contra Sander Gille y Joran Vliegen, perdiendo el desempate del primer set. Los belgas quedaron a dos puntos de la victoria con un 5-4 y Carreño Busta al saque. Pero los españoles reaccionaron, lograron el quiebre decisivo cuando el juez de silla dictaminó que la raque Vliegen tocó la red en una volea. España logró el quiebre con ese punto y Nadal selló la victoria con su saque.

Al final, la experiencia de Nadal fue clave para que España se impusiera 6-7 (7), 7-5, 10-7 en dobles.

Djokovic, el tenista con más títulos del Abiertos de Australia en su palmarés con siete, jugó en Sydney por primera vez en una década luego de cosechar una foja de 3-0 en partidos individuales durante la fase de grupos que Serbia disputó en Brisbane.

“En Brisbane tuvimos un apoyo increíble, pero esto está en otro nivel”, reconoció Djokovic. “Todos los serbios vinieron hoy aquí”.

“A veces estaban demasiado comprometidos, y Denis se molestó con razón en ocasiones, por los ruidos, pero en realidad era una atmosfera similar a la de la Copa Davis. Es decir, la Copa ATP da este tipo de oportunidades para que los jugadores vivan algo que no viven en el 90% de los torneos”.

Los termómetros superaron los 33 grados Celsius (91 F) durante el encuentro, y la bruma y la ausencia de brisa en el exterior del recinto hacían que el ambiente dentro fuese sofocante.

El capitán de Rusia, Marat Safin, dijo que su equipo se beneficiará del día extra de descanso y que podría ganar los duelos individuales a Serbia el sábado para solventar el pase a la final antes de los dobles