GOLF
Shane Lowry gana Abierto Británico
El regreso largamente esperado del Abierto Británico a Irlanda del Norte terminó el domingo con Shane Lowry sosteniendo el trofeo plateado Claret Jug en la Isla Esmeralda.
Incluso cuando la lluvia se detuvo, las lágrimas comenzaron a fluir.
Lowry, el irlandés de 32 años con nervios de acero y el toque suave sobre los greens, soportó el peor clima de la semana y la presión de una multitud que lo apoyó para ganar el Abierto Británico por seis golpes.
Firmó una tarjeta de 72 golpes, uno arriba de par, en la primera vez desde 1996 que el ganador estuvo sobre el par de campo en la ronda final, y no fue menos impresionante. Más difícil que la lluvia fue el viento, lo suficientemente fuerte para estropear una sombrilla. Lowry comenzó hacer bogeys en los nueve hoyos finales del Royal Portrush sin perder terreno.
En última instancia, el resultado nunca estuvo en duda. Nadie se acercó a menos de tres golpes en todo el día.
Y los miles que colmaron las galerías del Atlántico Norte pudieron sentirlo cuando Lowry, luego del cuarto bogey en siete hoyos, consiguió un birdie de 2,4 metros (ocho pies) en el 15to hoyo para ampliar su ventaja a seis golpes sobre Tommy Fleetwood.
Cuando su acercamiento al 18vo quedó justo en la periferia, sonrió ampliamente y abrió los brazos, abrazando al caddie Bo Martin. La ovación más ruidosa de la semana fue para el golpe con el que hizo el par del hoyo y que convirtió a Lowry en campeón de un major. Fleetwood tuvo que conformarse con su segundo subcampeonato.