MUNDIAL DE FÚTBOL
La 'Generación Dorada' belga dejó pasar una gran oportunidad
La llamada 'Generación Dorada' del fútbol belga tenía la gran ocasión de lograr el primer título mundial para su país, pero los sueños de los Diablos Rojos se estrellaron contra el muro francés en semifinales, dejando la amargura de la sensación de una oportunidad desaprovechada.
Será difícil que en el futuro tengan otra situación igual los integrantes del núcleo duro de la selección, aquellos que hicieron posible el renacer del fútbol belga con unas semifinales en los Juegos de Pekín-2008, punto de partida del actual equipo, un año después de que Bélgica cayera al puesto 71ª del ránking FIFA (el más bajo de toda su historia).
Los Vincent Kompany, Thomas Vermaelen, Jan Vertonghen, Toby Alderweireld, Marouane Fellaini, Dries Mertens, Moussa Dembelé... Todos superan la treintena y algunos de ellos, como los dos primeros, han tenido carreras marcadas por las lesiones.
Lo había advertido Kevin de Bruyne en la víspera del choque: "Es ahora o nunca". Quizá el talentoso volante del Manchester City, que pertenece a una generación más joven que los anteriores, con Eden Hazard, Romelu Lukaku, Thomas Meunier o Thibaut Courtois, pueda tener otra oportunidad en Catar-2022, pero cuatro años son muchos y hacer vaticinios así en el fútbol resulta muy osado.
- Nexo de unión de un país dividido -
Con un estilo de juego ofensivo puesto en práctica por el español Roberto Martínez, el equipo era alabado por todos y había conseguido unir a un país que vive dividido entre los valones (francófonos) y los flamencos (de lengua neerlandesa).
Hasta en eso había sido positiva la contratación en 2016 de Martínez, un técnico formado en Inglaterra y que no habla aún ninguno de los idiomas oficiales en Bélgica, por lo que el inglés es la lengua común en el vestuario belga.
Con contrato hasta 2020, al técnico español le queda ahora la tarea de buscar el relevo a los más veteranos para lograr un equipo potente que pueda llevar a los Hazard, De Bruyne y compañía a luchar de nuevo por el ansiado título en 2022.
Bélgica cae en semifinales por segunda vez en su historia. La primera fue contra Argentina en México-1986, el equipo que lideraba un Diego Maradona en el mejor momento de su vida. De hecho fue el '10' el que acabó con aquellos 'Diablos Rojos' con dos goles en la segunda parte.
La Francia actual no dispone, al menos por ahora, de un jugador como Maradona. Dejaron detalles Kylian Mbappé, Antoine Griezmann o Paul Pogba, pero lo que tumbó al piso a los belgas fue un cabezazo de Samuel Umtiti, un defensa.
- Portería a cero por primera vez -
El mejor símbolo de la gran cualidad del equipo de Didier Deschamps: la capacidad de defender todos a una, como hacían los Mosqueteros. Los 'Diablos Rojos' habían impresionado tras marcar 14 goles en 5 partidos (casi tres por encuentro), pero contra los Bleus se quedaron a cero.
Bélgica acabó cuarta en 1986, tras perder el partido por el tercer puesto en la prórroga... ¡Otra vez contra Francia (4-2)! Nada raro tampoco teniendo en cuenta que los dos países vecinos se han enfrentado, con la de San Petersburgo el martes, en 74 ocasiones. Los belgas seguirán dominando con 30 victorias a 25, pero los franceses habrán ganado en las tres ocasiones que se enfrentaron en un Mundial (1938, 1986 y 2018).
El sábado, también en San Petersburgo, los Diablos Rojos tendrán la ocasión de lograr su mejor clasificación en un Mundial, si derrotan al perdedor de la segunda semifinal del miércoles, Inglaterra o Croacia.
Será una buena ocasión para los belgas de no acabar con buen sabor después de caer en cuartos en el Mundial de Brasil-2014 y la Eurocopa-2016.
Podría acabar siendo el gran adiós para una generación de futbolistas que brillan todos con sus clubes, pero que hasta ahora no han logrado éxitos con la selección.
Puede que el fútbol regale en el futuro a varios de ellos una nueva oportunidad.