Adiós a un gran dominicano

Su larga y fructífera vida fue un perfecto compendio de sacrificios y éxitos.

Por eso, hablar de grandeza, en muchos sentidos, es lo que mejor sintetiza la valoración que de él ha hecho la sociedad al conocer la noticia de su muerte.

Víctor Méndez Capellán no la esperaba. Su dinámica rutina de trabajo, con tantos planes bullendo en su mente, no le permitía pensar que la vida, al fin, tendría su parada definitiva.

Su grandeza no le vino por sus aportes al país tras la fundación de VIMENCA, la empresa icónica de las remesas de divisas, el canal que muchos dominicanos usaron para sostener a sus seres queridos que quedaron en la patria.

Su alto vuelo vino por su noble corazón, siempre al servicio de las mejores causas humanas y de la nación.

Se forjó desde abajo. Y supo crecer con voluntad y tesón.

Huérfano de padres, sobrevivió como limpiabotas primero para ayudar a sus hermanos y también como mayorista de billetes y quinielas de la Lotería Nacional.

Una anécdota curiosa de esa etapa y recogida en el libro “Tributo a los fundadores”, relata que un fin de semana de imparables lluvias, los billetes que teni´a reservados para la venta, correspondientes a un premio especial de 50 mil pesos, se mojaron y nadie los quiso comprar.

Don Vi´ctor comprendio´ que tendri´a que asumir el pago de esos billetes, lo que significari´a su bancarrota.

Sin embargo, por un golpe de suerte, el billete ganador era uno de los que se habi´a mojado.

Con la base del premio, el empresario amplio´ su negocio de tal manera que monto´ una red de billeteros con 1,700 personas bajo esa condicio´n y sus ingresos dieron un salto considerable.

En 1960 fundó con las siglas de su nombre y apellidos, Viajes Vimenca, la cual registro´ otro hito empresarial cuando adquirio´ la representacio´n de American Express, la primera tarjeta de cre´dito internacional que se introduci´a en el pai´s.

Después, aquella iniciativa se extendió y surgieron Agente de Cambio Vimenca, Inmobiliaria Vimenca y Data Vimenca, y Remesas Vimenca.

En 2002, don Vi´ctor da otro salto en su trayectoria empresarial, con la creacio´n del Banco Vimenca.

El audaz y visionario empresario dominicano ha dejado un legado de más de 60 años de servicio y una labor altruista, que todos recordaremos.