Hacia el tercer año
En pocas horas, el presidente Luis Abinader iniciará el tercer año de su período de gobierno y es cosa normal que la sociedad dominicana tenga grandes expectativas.
Los primeros dos años han estado matizados por la contingencia de una pandemia que no solo dañó la salud en todo el mundo, sino que, además, perforó el sistema productivo.
Las secuelas sanitarias, económicas y sociales son incuantificables, de tomar en cuenta que enfrentar la pandemia del Covid requirió muchos recursos que el sistema impositivo no pudo aportar en su totalidad. Los dominicanos comprendemos esas limitaciones, pero así como nos hemos acostumbrado a convivir con el Covid, el jefe de Estado tiene que adaptar su estilo de gobernar a la realidad y provocar el máximo de eficiencia.
La gente espera la continuidad de ajustes en el gabinete que incluya a técnicos competentes, honrados y trabajadores, para que el país pueda sacar el mayor provecho posible a los escasos recursos de que dispone.
Seguir protegiendo la salud, incrementando la seguridad en las calles y fomentando el empleo productivo, son políticas públicas fundamentales para mejorar la vida de los dominicanos.
Esperamos que en este tercer año de gobierno el país siga disfrutando de paz, estabilidad económica y política social, para seguir consolidando la imagen de un país confiable para invertir y vivir.
Que la buenaventura, el juicio sereno y las decisiones maduras guíen las próximas ejecutorias del gobernante durante el resto de su período constitucional.