Internet en las escuelas
Durante las peores olas de la pandemia, la educación dominicana asumió el paradigma de las clases virtuales a todos sus niveles.
Fue la opción inevitable para impedir que los estudiantes, confinados en sus hogares, perdieran sus rutinas de aprendizaje sin hacer nada.
La infraestructura tecnológica que se habilitó para hacer posible las clases virtuales, por internet, radio y televisión, satisfizo en gran medida la expectativa de salvar en algo el calendario escolar.
Los alumnos, en su mayoría, recibieron tabletas para seguir sus clases desde el hogar, y el Ministerio de Educación creó equipos de maestros e instructores para impartirlas.
Con sus naturales deficiencias, el proceso permitió que los alumnos no perdieran el contacto con sus docentes ni con la adquisición de conocimientos.
Ahora que las clases se impartirán de manera presencial en las escuelas públicas, sería interesante que este paradigma no sea desactivado del todo, pues podría necesitarse, a igual o menor escala que antes, durante el resto del año escolar.
No todas las escuelas públicas disfrutan de banda ancha para que los estudiantes puedan recibir clases y leer libros desde sus dispositivos electrónicos.
Llevarles el internet a todas ellas debe ser una prioridad del gobierno, en las actuales circunstancias.
Es indispensable, entonces, que todas las escuelas que reanudan con normalidad las clases presenciales desde hoy, dispongan de un servicio pleno de internet para que la enseñanza siga apoyándose en estas útiles tecnologías.