Nuestros niños primero
La población infantil dominicana encara dos riesgos reales: padecer infecciones respiratorias con la influenza estacional, o contagiarse de Covid, que no distingue edades.
Por lo tanto, es de extrema importancia apurar el proceso de vacunación de los infantes contra las infecciones respiratorias que se han cobrado, en diez meses, 263 vidas.
En el caso actual, el problema es que el país no dispone de las vacunas para inocular a más de un millón de niños contra la influenza. Apenas hay 435,000 dosis, pero se esperan más.
En medio de esta apremiante necesidad está la otra prioridad: inmunizarlos contra el coronavirus, en vista de que se están incrementando los contagios de este virus en menores, sobre todo estudiantes.
Los consultorios de pediatras y las salas infantiles de clínicas y hospitales registran un flujo inquietante de infantes afectados por la influenza.
Esta situación obliga a los padres, médicos y autoridades a unirse en una campaña sin pausas para tratar de vacunarlos, tanto para prevenir los malestares respiratorios, como los fuertes síntomas del Covid.
A menudo, algunos de los síntomas de ambos se parecen y pueden llevar a confusión.
A pesar de que la ciudadanía parece haber bajado la guardia frente al Covid, en este caso de la influenza debemos de recordarle que puede ser letal y que no podemos darnos el lujo de desamparar de estos cuidados a niños y adultos vulnerables.