La clave es la brevedad

La radio y la televisión noticiosa fueron los precursores de la difusión de las noticias instantáneas y breves o sintetizadas. Los medios digitales de la era moderna le han sacado provecho a este modelo y lo han implantado como una clave del nuevo lenguaje de la comunicación social. Cincuenta años atrás, los mejores informativos de la televisión norteamericana ofrecían una óptima y general visión de la realidad mundial en apenas media hora. Un formidable conjunto que mezclaba entrevistas, análisis, videos que, en promedio, no superaban los tres minutos. La regla solo se rompía excepcionalmente si había una cobertura en vivo de un suceso importante. La televisión creó también las bases de un modelo de seguimiento continuo sin escatimar los últimos recursos de la tecnología para lograr, por ejemplo, que la guerra de la coalición internacional contra Irak pudiese verse en vivo desde los hogares, en cualquier parte del mundo. La brevedad y la instantaneidad de los medios digitales responden a otra necesidad. Ante el aluvión de contenidos que son capaces de difundir durante 24 horas continuas, las noticias se dan en raciones cortas. Una manera de incentivar, al menos, su conocimiento primario entre una audiencia que ya está saturada y no tiene tiempo para consumirlo todo, por más interesante o emocionante que sea la historia. Apenas uno de cinco usuarios, según las métricas, lee parcial o totalmente un contenido digital de cinco párrafos. Los párrafos deben formarse con oraciones breves, preferiblemente de menos de 60 caracteres. Si se pasan de este parámetro, lo que verán los usuarios en las pantallas de sus teléfonos inteligentes, que es la plataforma más usada en la conectividad, sería una masa de texto que les parecería densa e inacabable. Ahí mismo dejan de leer y se mueven a otros contenidos más sencillos, explícitos, sintetizados y precisos en la información. Esos son los que les despiertan el interés y los enganchan para su completo consumo. La brevedad, ahora, es la clave en esas y otras plataformas.

La clave es la brevedad

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