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Atrapen a esas fieras salvajes

La doctora Angelina Mercedes de los Santos Johnson fue asesinada brutalmente en su residencia de Bella Vista.

Su cuerpo fue hallado el miércoles en la noche con un cordón atado al cuello.

Con 83 años de edad, esta pediatra, reconocida por su gran dedicación a atender a la niñez en el hospital infantil Robert Reid Cabral, en horario regular, y en su propio hogar a cualquier hora, parece haber sido víctima de los ladrones que tienen mucho tiempo azotando los sectores de Bella Vista y Mirador Norte, en el centro de la capital.

La distinguida profesional aparentemente fue víctima de delincuentes que aprovecharon que ella había cobrado su pensión, penetraron en su casa, rebuscaron por todas partes, se llevaron valores y la ahorcaron en forma inmisericorde.

¿Qué está pasando en este país? ¿Qué tipo de delincuentes son estos que después de dominar a una anciana, robarles sus pertenencias, también se deleitan asesinándola?

Se habla de que vivía sola y de que la Policía ha detenido a media docena de haitianos para investigarlos en torno al crimen.

Cualquiera puede ser el punto de partida para hacer una buena investigación, pero lo que es inadmisible es que una profesional que dedicó lo mejor de su vida a entregarse para proteger la vida de la niñez, en un hospital público, sea asesinada y que un hecho tan horrible, pueda quedar impune o que se inculpe a un infeliz para cerrar el caso.

Nada de eso. El crimen de la pediatra Angelina Mercedes de los Santos Johnson no puede quedar sin una condena ejemplarizadora para el verdadero culpable, nunca sobre un falso positivo.

Queremos al o a los culpables presos, con un expediente contundentemente elaborado, con fiscales competentes para encausar con pruebas a los encartados y llevarlos ante jueces firmes en la defensa de una justicia a tiempo y proporcional a la gravedad de este crimen.

Si la sociedad se queda indiferente ante una bestialidad como esta que acaba de ocurrir en el centro de la ciudad, y la autoridad se torna inútil, estamos perdidos.

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