Generando contenidos propios

La generación de contenidos propios, con calidad, a partir de un sistema de investigaciones periodísticas más organizado, se ha convertido en una de las apuestas predominantes en los procesos de reinvención de los medios impresos.

Propiciar una agenda en base a historias que a su vez se conviertan en noticias de interés le permite a los diarios esquivar las resacas informativas que dejan las redes en el ecosistema digital y ofrecer nuevos panoramas a los lectores.

No es que la producción de contenidos exclusivos sea una novedad en el diarismo. Esa ha sido siempre la aspiración. Lo diferente ahora es la prioridad y el énfasis que se les asignan a las búsquedas estructuradas a partir del manejo de bases de datos con sus correspondientes análisis e interpretaciones.

Con estas herramientas, es posible completar historias con amplitud de ángulos que pudieran pasar por alto o inadvertidos en las coberturas rutinarias de los medios, mediante la planificación de investigaciones puntuales que alternativamente se asignan a un grupo específico de periodistas o a reporteros en particular.

En el modelo actual, los miembros de una Redacción, no importa el área o seccion para la cual están asignados, son llamados a participar en un equipo multidisciplinario para intervenir en una investigación a gran escala.

Ya ha quedado desplazado el modelo de concentrar un periodista en cada fuente oficial, como una forma de evitar que los contenidos del diario sean predominantemente los que originen la agenda externa, y darles un papel más útil en las calles, que es donde están las noticias y sus protagonistas principales.

A los lectores de hoy les gusta conocer de cerca lo que les ocurre a los ciudadanos y a las comunidades. Sus sentires, sus aspiraciones, sus dificultades, sus vivencias diarias. Desestima lo que huele a propaganda o a información parametrada e insuficiente y busca algo más, algo distinto a lo que le parece conocido o redundante.

De ahí que las apuestas de contenidos propios emerjan como un recurso de diferenciación, pero también de profundización y de manejo de calidad de los datos e informaciones reunidos en una investigación o en reportajes y crónicas de personajes y situaciones, aportando un mejor contexto para el conocimiento de la realidad.

Para aquellos diarios que también poseen plataformas digitales, estos contenidos especiales enriquecen sus ofertas en redes sociales, ya que no solo se quedan en textos sino que complementan con recursos audiovisuales, que son los más consumidos por sus audiencias.

Usando estas y otras claves en sus procesos de reinvención, los impresos están logrando captar mayores suscripciones de lectores que buscan información de calidad, profundidad y fidedignas que no encuentran en las redes con semejante tratamiento ni profesionalidad.