La posición de la SIP
La Sociedad Interamericana de Prensa, siempre atenta a todo cuanto signifique peligro para el ejercicio profesional y la vida misma de los periodistas, ha expresado su alarma por los hechos intimidatorios que se han producido contra tres periodistas dominicanas, entre ellas nuestra Jefa de Redacción. La SIP ha condenado este intento intimidatorio contra María Isabel Soldevila, jefa de Redacción del Listín: Margarita Cordero y Norma Sheppard, de 7Días y Radio Mil, atribuido a gentes que presuntamente sirven al senador oficialista de San Pedro de Macorís, Alejandro Williams. No solo ha visto la SIP en este acto un propósito destinado a obligar a los periodistas a la autocensura, sino que ha pedido formalmente al Congreso que investigue la situación y aplique el reglamento a cualquiera de sus miembros que haya osado irrespetar la libertad de prensa y la actividad profesional particular de las periodistas envueltas en el acto intimidatorio. El presidente del Senado ha respondido positivamente a esta solicitud y esperamos que actúe en consecuencia y que esclarezca debidamente la denuncia. Mantener la libertad de expresión ha costado vidas, sacrificios y muchos riesgos. Por suerte, muchos ciudadanos la valoran y están dispuestos a defenderla, a pesar de tantas limitaciones y peligros. Estamos, justamente, ante un momento en el que es preciso definir hasta dónde querían llegar los agentes pagados que intentaron “interrogar”, haciéndose pasar por representantes del FBI o del Medicaid de los Estados Unidos, a las tres colegas que manejaron informaciones sobre una supuesta investigación al senador, en su condición de médico en ejercicio en Nueva York. La intervención de la SIP es oportuna por cuanto su denuncia tiene eco continental y es capaz de mover la solidaridad de los diarios afiliados a ella y hacer saber a los que están detrás de cualquier trama que nuestras periodistas no están solas ni desamparadas en estos momentos.