Alfi Fanjul, una metáfora de la crisis
Para Alfi Fanjul, el prospero empresario de la industria azucarera y turística, la crisis económica de ahora se asemeja a una de esas tormentas tropicales que, de año en año, nos abaten. Las palmeras se inclinan ante el embate de los vientos, pero no se caen. Y se yerguen de nuevo. Y los bosques recobran su antiguo esplendor, mientras el campo, que lucía arrasado, se vuelve fructífero. En tiempos tormentosos, lo mejor es recogerse, protegerse, y luego salir a trabajar por la reconstrucción. Para él, la crisis de la economía global tiene demasiada semejanza con lo que ahora nos ocurre. Sentimos una sensación de pérdida, de quebraduras, de peligro general. Él ve el horizonte mas allá de este fenómeno que considera episódico, y así debiéramos verlo todos. Fanjul compartió su metáfora justo en el momento en que inauguraba en Casa de Campo, La Romana, la tercera versión de la Feria de Andalucía, una muestra resumida de lo que quieren ofrecer e invertir en nuestro país las 250 mil empresas que operan en la atractiva y rica región española. La feria es una maquinaria de comercio e intercambio, de mutuo provecho para nuestro país y España. La visión de los que allí participan es la de un futuro de muchos negocios, no de crisis ni de abatimientos. Sirvámonos de esta oportuna reflexión de Alfi para mirar el futuro con optimismo, con la seguridad plena de que esta tormenta la podemos capear, y que nuestras palmeras seguirán enhiestas y fuertemente enraizadas, como ocurre siempre con los pueblos bendecidos por la gracia de Dios.