Embajadora de EEUU: “Cuando se empodera a la mujer, las comunidades florecen y los países prosperan”
Bernstein destacó que las mujeres empoderadas invierten en sus familias y comunidades estimulando el crecimiento económico.
La embajadora de Estados Unidos en República Dominicana, Robin S. Bernstein, afirmó esta mañana que el empoderamiento económico de las mujeres es fundamental para asegurar el desarrollo y la autosuficiencia económica y reclamó que la mujer este presente a la hora de que se tomen importantes decisiones en el país.
En discurso durante la conferencia por el 23 aniversario de la organización norteamericana Batey Relief Alliance (BRA), Bernstein, destacó que cuando las mujeres están empoderadas invierten en sus familias y comunidades, estimulando el crecimiento económico y creando sociedades más estables, y destacó que el tema de género es un eje transversal de las prioridades que tiene su gestión en el país: la seguridad, la inversión y el comercio.
“Cuando se empodera a la mujer, las comunidades florecen y los países prosperan”, expuso Bernstein en su disertación virtual, en la que aseguró que “el empoderamiento de la mujer tiene muchas posibilidades: mayor participación en los procesos políticos, liderazgo, igualdad de acceso a la educación, empleos mejor remunerados, mejor salud y lo más importante: un país más próspero”.
Bernstein y el presidente ejecutivo de Scotiabank en el país, Gonzalo Parral fueron los disertantes centrales de la conferencia “La necesidad de promover una política responsable de igualdad de género durante el delicado y urgente proceso de rescatar, estabilizar y relanzar la economía local post COVID-19”, co-auspiciada por la Cámara de Comercio Dominico-Canadiense en la República Dominicana (Cancham-RD) y patrocinada por el Banco Popular.
Parral destacó que un ambiente libre de discriminación ayuda a tener equipos laborales mucho más comprometidos y mejor conectados. Agregó que las empresas con políticas inclusivas pueden aumentar su productividad más de un 60%, según un informe de la Organización Internacional del Trabajo (OIT).
Sostuvo que como empresa inclusiva promueven la colaboración entre los empleados, bajo la sombrilla de la equidad y el respeto, lo que les posiciona como uno de los mejores lugares para trabajar en el mundo, de acuerdo a Great Place To Work Institute.
La conferencia por el 23 aniversario de la creación de BRA se inició con las palabras de su presidente-fundador de BRA, Ulrick Gaillard, escenario que aprovechó para resaltar los logros de esa organización y añadió que “el mundo fue tomado por sorpresa por el COVID-19 que ha infectado 40 millones de personas y cobrado la vida de más de un millón.
Intervinieron, además, Gustavo de Hostos, presidente de la junta directiva de la cámara de Comercio Dominico-Canadiense (Cancham-RD) y Nexcy de León, vicepresidenta de la BRA en República Dominicana.
COVID agudiza las desigualdades existentes La presidenta de BRA Dominican, Togarma Rodríguez, en la última disertación de la conferencia donde señaló que durante el periodo de pandemia se han agudizado las desigualdades ya existentes, evidenciando las deficiencias de nuestro sistema social, político y económico.
"Entre los meses de marzo y agosto de este año, el 100% de las mujeres entrevistadas manifestaron haber sufrido violencia psicológica, el 74% violencia física y el 56% violencia sexual; un 68% expresó también ser objeto de violencia económico-patrimonial. Seis de cada diez aseguraron haber sido amenazadas de muerte por sus parejas. Sin embargo, en un 72% de los casos no denunciaron a los agresores", expuso Rodríguez.
Agregó que al momento de este estudio una tercera parte de estas mujeres laboraba, en tanto que el 26% estaban desempleadas y solo el 22% contaba con negocio propio.
Refirió que ante la situación que viven las mujeres en la actualidad es necesario promover una política responsable de igualdad de género durante el delicado y urgente proceso de rescatar, estabilizar y relanzar la economía local post la pandemia COVID-19.
Para esto, expuso se requiere abandonar los intereses hegemónicos masculinos, incluyendo el enfoque de género, es decir, incorporar la perspectiva de la mujer a la hora de elaborar las políticas fiscales y los procesos de gestión financiera y presupuestaria.