La actividad económica de China se vuelve a paralizar por el rebrote de COVID-19
Un brusco rebrote del COVID-19 en Pekín ha frenado en seco el retorno a la actividad económica en la capital china y ha afectado duramente a bares, restaurantes y actividades deportivas.
Tras descubrirse la semana pasada un foco de infección en un mercado mayorista, la municipalidad confinó varias zonas residenciales, instó a las empresas a autorizar el teletrabajo y pidió a los habitantes que no abandonen la ciudad.
El “reconfinamiento” provocó este miércoles el cierre de escuelas, y los dos aeropuertos internacionales anularon más de mil vuelos --un 65% del total diario-- según la aplicación Variflight.
La municipalidad anunció el miércoles que Pekín registró 31 nuevos casos del nuevo coronavirus en las últimas 24 horas, una cifra que se ha mantenido estable por cuarto día consecutivo.
Preocupación
En otros lugares de la ciudad, los bares del popular barrio de diversión de Sanlitun recibieron el martes por la noche la orden de “cerrar su actividad”.
Además, la municipalidad ha exhortado a evitar las “comidas de grupo” que no sean esenciales.
Preston Thomas, copropietario del restaurante gastronómico The View 3912, debió cerrar dos meses durante lo más alto de la epidemia, y su establecimiento “sigue convalesciente”, explica.
En línea
Wang Kai, propietario del pequeño bar Nina, ubicado en las callejuelas del viejo Pekín, espera recibir menos clientes esta semana y ser sometido a controles más estrictos.
Con el cierre del mercado de Xinfadi, que normalmente suministra el 70% de las verduras consumidas en Pekín, las autoridades y empresas tratan de garantizar el suministro de la capital.