Mercado laboral
¿Cuáles son las diferencias entre los trabajadores asalariados y los autónomos?
La era de la digitalización ha cambiado la forma de trabajar. Cada vez son más las personas que optan por trabajar de manera autónoma, desde la casa, con sus propios equipos y no bajo las condiciones de un empleador.
Aunque es difícil determinar la cantidad de personas que trabajan bajo estas condiciones, lo cierto es que esta modalidad se mantiene en aumento. Por eso algunos países han comenzado a regular el teletrabajo.
La quinta de la serie “El futuro del trabajo en América Latina y el Caribe”, del Banco Interamericano de Desarrollo (BID), aborda el tema de ¿Cómo garantizar los derechos de los trabajadores en la era digital? y cita algunas de las diferencias entre los trabajadores asalariados y los autónomos.
El estudio precisa que algunos beneficios de ser trabajador asalariado formal son contar con un régimen de protección laboral y de seguridad social amplio. Salario mínimo, vacaciones remuneradas, protección frente al despido, derecho a organizarse y a formar sindicatos.
Por el contrario, para los trabajadores autónomos, este régimen de protección desaparece o es significativamente menor, por lo que existe una distancia importante en términos de protección laboral y cobertura de la seguridad social entre ambos grupos.
Los trabajadores autónomos, además, no gozan de derechos laborales como salario mínimo, licencia anual, vacaciones remuneradas, aguinaldo, ajustes obligatorios de sus ingresos e indemnización por despido. Tampoco cuentan con los mismos niveles de protección social. En algunos países no reciben asignaciones familiares ni licencia por maternidad o paternidad, ni tampoco tienen cobertura por accidentes de trabajo, seguro de desempleo o acceso a pensiones.