Software facilita gestión del talento empresarial

La evaluación del desempeño del personal de una compañía también se puede ver beneficiada hoy gracias a la tecnología, facilitando la identificación de las fortalezas y debilidades de los colaboradores, así como la toma de decisiones oportunas en la organización.

Teresa Morales Muñoz, directora general de Softland Capital Humano, explicó que “afrontar un proceso de digitalización les permitirá a las empresas identificar colaboradores con alto desempeño y potencial basado en una evaluación objetiva. “La retroalimentación para aumentar la productividad de sus empleados ayudará a configurar la retroalimentación colaborador-jefatura en 360 grados, seguido de la autoevaluación y proposición de objetivos, entre otros”.

Manifiesta que un sistema de gestión de talento permite ofrecer a todo tipo de empresas la mejora, promoción y fidelización del talento, por tal motivo, Softland Capital Humano recién ha presentado en el país, a través de su principal Softland Dominicana este práctico programa.

El citado programa es un software nativo en la nube, cuenta con un diseño web 100% adaptable a múltiples navegadores, lo que facilita su instalación y se ajusta a las necesidades de las pequeñas y medianas empresas. Un sistema de gestión de talento es una tecnología que proporciona las herramientas necesarias para gestionar el ciclo de vida de sus colaboradores: portal de personas, selección, plan de bienvenida, capacitación, evaluación del desempeño, plan de carrera, sucesión, compensación y beneficios, encuestas, detección de oportunidades de mejora dentro de las organizaciones, cuadro de mando, entre otros.

(+) GESTIÓN HUMANA EN LA ERA DIGITAL “Cualquier compañía que quiera gestionar su recurso humano y ligar los objetivos empresariales con los personales, necesita apoyarse en altas tecnologías para mejorar el desempeño de sus colaboradores”, dijo Teresa Morales Muñoz, directora general de Softland Capital Humano. Resaltó que en la actualidad, los empleadores deben asumir cambios y aceptar que “vivimos en una era tecnológica. La gestión del talento debe centralizarse en herramientas tecnológicas”.