La Antesala del éxito

“Salir a flote “como se dice en buen Dominicano es sacar de manera intrínseca la motivación en los peores momentos, es decir “yo puedo” a pensar de que todas las cosas que estén aconteciendo a tu alrededor indique lo contrario.

Si se publicaran las adversidades de esas personas que sienten haber alcanzado el tan anhelado éxito, la historia fuera otra.

Sin embargo, cuando las ganas de rendirse son mayores, cuando el miedo se apodera de tu mente y el rechazo es un gran enemigo, se ignora.

Se trata de internarlo cada día, venciendo todos tus miedos e ignorando esos episodios de humillación y muchas veces desprecio.

Es mostrar ser fuerte mientras impides que tus ojos derramen esas gotas saladas que acarician tu piel en los momentos de frustración y estrés.

Lo más difícil es decirte “si puedo” y romper esas barreras que te señalan como incapaz. Se trata de esa pelea con tu propio “yo” hasta ir teniendo los resultados que te demostraran ser capaz.

Es evidente que para vencer estas emociones y esos grandes retos se necesita la ayuda de un ser superior como lo es Dios, así como de esas personas que te quieren y desean tu bienestar.

Mientras los victoriosos exhiben con una sonrisa, orgullo y efervescencia eso por lo que tanto lucharon; algunos elogian con orgullo, otros culpan a la suerte y nunca faltan aquellos que simplemente no lograron hacerlo y les molesta.

Es lindo ver una imagen con un título, estatuilla, un reconocimiento en mano o simplemente alcanzar algo que tenga peso en la vida personal de alguien y en algunos de los casos en la sociedad, sin embargo obviar lo que esa persona atravesó hasta estar ahí, seria injusto.