La quimera de oro

En esta cinta, Chaplin vuelve con Charlot, el personaje que lo catapultó en el cine. Ahora lo recrea en Klondike, quien es atraído por la llamada fiebre del oro a finales del siglo XIX. La gran afluencia de inmigrantes estadounidenses obligó a las autoridades de Canadá a crear un territorio para tener más control de dicha inmigración. En ese contexto se ambienta la película, y el famoso “vagabundo” se ve sorprendido por una tormenta de nieve y decide refugiarse en una cabaña donde se encuentra con un asesino prófugo y otra persona que parece un gigante por su tamaño.

Al echar a la suerte quién buscaría algo para comer, le toca al prófugo de la justicia, quien es encontrado por la policía; éste asesina al agente y escapa con el trineo, abandonando juntos, a los dos que quedan en la cabaña: el gigante Mac Kay (Mack Swain) y el Vagabundo.

Pasan los días, la tormenta sigue incrementándose, y el hambre hace estragos en ambos personajes. El Vagabundo posee delirio extremo cuando nota que el gigante es una gallina y trata de matarlo para comer, hasta que desfallecido de hambre, logra cocinar sus propios zapatos, como si fuera un bistec, y los cordones los enrolla como si fueran espaguetis, realizando con esta escena un cuadro de surrealismo.

Luego, el vagabundo, atraído por las luces del pueblo, llega a un cabaret donde conoce a la bella Georgia (Georgia Hale), quien decide bailar con él, solamente para darle celos a Jack Cámeron quien viene siendo el Don Juan del lugar, quien, como todo un caballero, defiende el honor de la dama, pero un reloj de pared cae en la cabeza a Jack, creyendo el vagabundo que fue él quien lo inhabilitó. Como vencedor, invita a Georgia y sus amigas a la cena de navidad en la cabaña, con lo que se prepara para la famosa comida, pero queda dormido por la espera, y se recrea una de las mejores y más emblemáticas escenas del cine, cuando Chaplin juega con dos tenedores y dos trozos de pan para realizar el baile de los panecillos.

Georgia se acuerda del vagabundo y va con sus amigas a visitarlo para burlarse de él, pero no lo encuentran. Ella, al ver la casa adornada para la ocasión navideña, siente remordimientos. Entretanto, regresa a la ciudad Big Jim, quien recuerda dónde está la montaña de oro y se alegra enormemente cuando encuentra allí al vagabundo, y deciden ir en búsqueda del preciado metal. En esta escena la cabaña se desliza, y se encuentran al borde del precipicio, y Chaplin realiza todas las maniobras posibles de gaps para el deleite del espectador.

El final es feliz para el vagabundo, que logra conseguir el oro, y por ende, hacerse rico, para luego coincidir con su dama adorada en un barco y completar su suerte.

“La quimera del oro” le tomó a Chaplin rodarla en 14 meses, y el afán perfeccionista de este genio del cine, hizo plasmar grandes realismos a la trama, resultando una de las películas más taquilleras de la década de los años veinte, llegando a convertirse en un clásico del séptimo arte.

El hecho de disfrutar una película de Charles Chaplin, es sumergirse dentro del melodrama que el actor/director quiere que, como espectador podamos sentir. No solamente desea que riamos con sus ocurrencias, sino que entendamos el drama social que subyace dentro de cada una de sus actuaciones, a través de un personaje que lo dio todo para comprender las injusticias de nuestra sociedad.

(+) ALGUNAS CURIOSIDADES DE LA PELÍCULA: 1 La escena cuando Chaplin se come el zapato y los cordones como si fueran unos espaguetis, se ha convertido en un símbolo del cine mundial.

2 La parte de Georgia, fue escrita originalmente para la nueva esposa de Chaplin, Lita Grey, pero fue reemplazada por Georgia Hale porque su cónyuge quedó embarazada.

3 Un verdadero oso negro americano fue utilizado para la escena en la que el “Lone Prospector” se encuentra con la bestia. Esto fue inusual para la época, ya que lo habitual en este tipo de escenas es que, en vez de utilizar animales emplearan actores disfrazados.

4 Los 2.500 hombres que interpretan a los buscadores de oro como extras eran vagabundos reales contratados por un día.

5 Era el largometraje favorito de Chaplin, según confesaba él, que le supuso su consagración como estrella, ya que fue un gran éxito de crítica y público. Es la comedia más larga (fue reducida a nueve rollos de su duración original de diez) y la más elaborada de las comedias mudas de Chaplin, de hecho le llevó catorce meses terminarla, y es además uno de los pocos largometrajes clásicos auténticos y sin adulterar de los años 20.

6 El guion, escrito por Chaplin, se inspira en documentación gráfica de los buscadores de oro de Klondyke (1896-98) y en el libro sobre el desastre del grupo Donner (1846), un caso real de un grupo de hombres que, perdidos en las Montañas Rocosas, acabaron por devorarse entre ellos. Se rodó en escenarios naturales de California (Los Ángeles, San Fernando Valley, Sierra Nevada, Inverson Ranch) y Colorado y en los Chaplin Studios (Hollywood), durante 16 meses (entre enero-1924 y mayo-1925), con un presupuesto de 2 millones de dólares.

7 Para las distintas escenas se diseñaron maquetas y se fabricó una cordillera en miniatura con madera, alambrada, yeso, sal y harina.

8 En 1942 fue reestrenada en versión sonora, con un nuevo acompañamiento musical y narración en off del propio Chaplin, y recibió dos nominaciones a los premios Oscar: Mejor Sonido y Mejor Banda Sonora.

9 En 1998, por iniciativa del “American Film¥s Institute”, destacados críticos cinematográficos la votaron como una de las Mejores Películas de la historia.