Faltan enlodados de cúpula morada

Miles de personas en tertulias, círculos y grupos sociales, familiares y amistosos, pasan balance al despliegue con apresamientos emprendido por el gobierno en un terreno enlodado, bajo la creciente presión social de la Marcha Verde y una lupa internacional con fechas letales.

Cualquiera pudiera pensar que el anillo palaciego emprendió una ofensiva para ganar terreno, sucediendo que pierde terreno actuando a la defensiva bajo coordenadas de alto riesgo, algunas “invisibles”.

Echaron al agua al ministro Montás por un caso inaplazable, pero el rancho arde en el PLD, no porque Danilo atice, sino porque la soga no aguanta más, aún sea en su parte frágil.

Son muchos los “intocables” pero entre comillas. No es verdad que se puede pasar un lodazal sin enlodarse. Ni quien lo dijo se lo cree. Todo se sabe.

Así que, como dice el título, faltan enlodados de la cúpula morada. Tantas mentiras acumuladas no podían seguir encubiertas.

Nadie creyó que las elecciones la cubrieron “compañeritos de la base” con jarritos en las esquinas o vendiendo el vocero “Vanguardia”. Lo mismo puede decirse del peaje pagado a los legisladores leonelistas para que votaran por la reforma aprobatoria de la reelección.

La Marcha Verde es huella de la memoria histórica dominicana.

La Marcha Verde es un fenómeno social-ciudadano.

Los sociólogos e historiadores tienen el desafío de auscultarlo.

La gente del pueblo debe dar la espalda a inventos palaciegos dando palos a ciegas, buscando la quinta pata del gato.

Si alguna organización concita a las movilizaciones es el PLD, siendo el partido más corrompido de la historia dominicana, el partido que hace “millonarios de verdad”.

Pero la Marcha Verde sigue indetenible. Le hizo una “visita sorpresa” a los morados atrapándolos “fuera de base”, “locos y sin idea”.

Ahora su “león” publica que todos dominicanos somos corruptos, llevando la corrupción en la sangre.

Así que el viento sopla verde sumando fuerzas en la sultana oriental, tierra de peloteros, poetas y cañeros.

Mañana domingo, la cita colectiva es temprano en Macorís del Mar, con banderas verdes pidiendo masivamente juicio a los corruptos y punto a la impunidad.

“Está llegando... la hora”.