Santo Domingo 23°C/26°C thunderstorm with rain

Suscribete

Tiempo para el alma

“Alivia las angustias de mi corazón y sácame de mis congojas. Mi aflicción y mi fatiga, perdona todos mis pecados”. Sal. 24: 17, 18.

El Señor ha dicho “no te dejaré ni te desampararé”. Él está con nosotros, incluso cuando ignoramos su presencia en nuestras vidas, cuando pensamos que estamos solos, abandonados, desamparados, olvidados. Dios no quiere tu desgracia, ni la mía, ni la de ningún otro; Él, en su infinita sabiduría y en su misericordia sabe cómo transformar el lamento en esperanza, el dolor en oportunidad, y nos va mostrando su propósito en nuestras vidas.

Cuando la angustia, la aflicción y el sentimiento de desamparo nos invadan, no demos la espalda a Dios, al contrario, busquemos su rostro, su palabra, su mensaje, su visita en la quietud de nuestros pensamientos. No tapemos nuestros oídos cuando estemos buscando una respuesta, mis queridos lectores, Dios siempre está cuando lo llamamos.

Tags relacionados