ENCUENTRO VERDE (1 DE 2)

CAD: aliado social y defensor del patrimonio ambiental dominicano

“VAMOS A SENTARNOS”. LA INVITACIÓN DEL CONSORCIO AMBIENTAL DOMINICANO (CAD) AL ESTADO HACE 25 AÑOS QUE DIO PIE A LA INVESTIGACIÓN Y LA DEFENSORÍA DEL MEDIO AMBIENTE

En febrero del 2019, el Consorcio Ambiental Dominicano (CAD) cumple 20 años de fundado. Discretamente, con una filosofía basada en el trabajo conjunto de los socios que la conforman, la institución sin fines de lucro se afianza como gestora de muchos de los logros ambientales conseguidos en las últimas dos décadas en la formulación de políticas públicas ambientales y la promoción e implementación de programas relacionados con la educación ambiental, la agricultura sostenible, la conservación y el ecoturismo.

En los últimos 12 años, es dirigido por el ingeniero agrónomo Sésar Rodríguez, invitado especial al Encuentro Verde de Listín Diario, un espacio de diálogo sobre temas ambientales coordinado por la bióloga Yvonne Arias.

Es un logro del CAD, por ejemplo, la creación de la primera área protegida privada de República Dominicana, dedicada a la conservación del hábitat del zorzal migratorio y espacio pionero en la ejecución de programas en los que se priorizan por igual los recursos naturales y el potencial trabajador de las comunidades.

FACILITADOR SOCIAL Y AMBIENTAL

Todo comenzó a gestarse en el año 1993. Luego de las cumbres de la Tierra de Estocolmo 72 y Río 92, los países ricos se comprometieron a destinar dinero para el medio ambiente. El pueblo suizo, a través de la Asociación Suiza para la Cooperación Internacional (Helvetas), decidió colocarlo en República Dominicana entre otros motivos, explica Sésar Rodríguez, porque ambos países tenían más o menos el mismo tamaño y población. Helvetas, que ya trabajaba en Haití, instala sus oficinas aquí y comienza a gestionar un programa ambiental para buscar respuestas a la pérdida rápida de biodiversidad que estaba ocurriendo en República Dominicana y cuyas causas reales se desconocían. “No había mapas. El Sistema de Información Geográfica nace con ese programa. Cuando llega Helvetas, ¿a quién va a buscar? A las instituciones que ya trabajaban con temas ambientales aquí, como la fundación Loma Quita Espuela, el Grupo Jaragua, la Fundación Progressio, el CEBSE o el Centro de Agricultura Sostenible con Tecnología Apropiada (CASTA). Y del gobierno se unió el departamento de Vida Silvestre de la Secretaría de Agricultura. Y se empezó a trabajar conjuntamente”. ¿En qué? “Se estaban perdiendo los recursos y nosotros no sabíamos qué estaba pasando. El programa surge para hacer un levantamiento, mapas”, comenta Rodríguez. El programa se conformó con alianzas, sigue el ingeniero agrónomo: los suizos aportaron la parte económica y metodológica, sin interferencias; y los alemanes aportaron la experiencia técnica a través del Servicio Alemán Social-Técnica (DED), ofreciendo cooperantes a cada organización. “Llegó Hannelore Bendsen, especialista en sistema de información geográfica, se crean mapas y de ahí nacen muchísimas áreas protegidas y se descubren nuevas especies.. El programa logra su cometido y luego de ciertos conflictos llegamos a un nivel de reflexión: ¿por qué estamos aquí: por el dinero que dieron los suizos o vamos a seguir? Porque los programas terminan y los suizos no iban a estar acá todo el tiempo. Y nosotros decidimos que debíamos seguir.

¿POR QUÉ HUBO CONFLICTOS AL PRINCIPIO?

Uno de los objetivos del CAD es quitar presión a los hábitats trabajando con la gente y las comunidades. 

Uno de los proyectos “ensayo” que enorgullece a la CAD lo implementaron en la provincia Barahona, en la zona de Bahoruco Oriental, en los municipios de Polo y Paraíso: intervenir con los socios una zona en manejo ambiental y desarrollo ecoturístico. “En el CAD sabíamos llevarnos muy bien pero no sabíamos poner las herramientas sobre el terreno con actores diversos. La estrategia de desarrollo ecoturístico se hizo con todos los miembros para esa zona”. Cada socio implementó sus experiencias ecoturísticas y conservación en la zona. La fundación Progressio, por ejemplo, logró reproducir ébano (Magnolia hamori) en Polo. “También intervenimos los ayuntamientos. En ese entonces se crea la Ley de Medio Ambiente y se crean las unidades de gestión ambiental (UGA). Nosotros trabajamos en la formulación de tres”. ¿El resultado? Una resolución que declara a Paraíso municipio ecoturístico y el logro de pequeñas metas que confirman el trabajo hecho en las comunidades, como la prohibición de lavar vehículos en los ríos, regular la contaminación sónica, que no haya animales sueltos en la calle y la recogida adecuada de la basura.

DEFENSORES EN TODOS LOS NIVELES

Las políticas ambientales adoptadas en las últimas décadas también les deben mucho al CAD.

Gran parte de sus actores fueron gestores de la Ley 64-00 que creó la Secretaría (hoy Ministerio) de Medio Ambiente, organizando previo a su aprobación el Foro Nacional de Áreas Protegidas. Además de servir de vínculo entre la sociedad civil y el gobierno, el CAD aportó propuestas que llevaron a la inclusión del tema ambiental en la Constitución Dominicana del 2010 en aspectos relacionados con el agua, áreas protegidas, biodiversidad y pago por servicios ambientales.

“Nuestra filosofía no pretende fiscalizar nada, siempre será aquí, todos al mismo nivel en la mesa. Es parte de la filosofía y visión de CAD la construcción con una visión colectiva para que salga un producto colectivo”, opina don Sésar.

¿Qué hace el CAD para crear en la gente ese sentido de pertenencia y cuidado de su patrimonio natural?

“Lo trabajamos en diferentes niveles –responde Rodríguez-. A nivel de la comunidad y del empoderamiento de la gente, de las organizaciones de la comunidad, pero procurando dar una información técnica y veraz, y que la gente lo entienda, de cuáles son los beneficios ambientales que aportan las áreas protegidas a la sociedad y a la comunidad. Pero también hemos pasado al ámbito político. Hemos tomado posición y hemos ido a las consultas del Congreso, solicitamos entrevistas con los legisladores y llevamos nuestras posiciones por escrito. Y también hemos estado al frente, en la calle, en todos los niveles que hay que estar para defender el patrimonio natural”.

PERFIL.

FUNDADORES DEL CAD Nueve instituciones (nacionales, internacionales y del gobierno) fundaron el CAD: la Asociación Suiza para la Cooperación Internacional (Helvetas), el Servicio Alemán de Cooperación Social-Técnica (DED), la dirección de Inventario de Recursos Naturales (Direna) y la Dirección de Vida Silvestre de la Secretaría de Estado de Agricultura (SEA), el Jardín Botánico Nacional, la Fundación para el Mejoramiento Humano (Fundación Progressio); Fundación Loma Quita Espuela; el Grupo Jaragua; el Centro para la Conservación y Ecodesarrollo de la Bahía de Samaná y su Entorno Inc. (CEBSE) y el Centro de Agricultura Sostenible con Tecnología Apropiada (CASTA). Ahora se unió la empresa Los Montones con la marca “La Loma”. Otras 40 organizaciones forman parte de la institución como socios. El CAD ha tenido tres directores: David Arias, Rosa Lamelas y don Sésar.

Continuación: Programa ‘Dos mundos, un ave’