VIDA VERDE
Jardín Botánico Lankester
El centro de investigación y conservación propiedad de la Universidad de Costa Rica surgió cuando el naturalista británico Charles Herbert Lankester comenzó a cultivar y estudiar las plantas epífitas del país centroamericano.
Jardín japonés en el Jardín Botánico Lankester.
Lo que comenzó en la década de 1940 como el proyecto personal de un solo hombre se convirtió con el correr de los años en uno de los principales centros de investigación botánica de la región.
El Jardín Botánico Lankester, centro de investigación y conservación propiedad de la Universidad de Costa Rica (UCR), surgió cuando el naturalista británico Charles Herbert Lankester (1879-1969) comenzó a cultivar y estudiar las plantas epífitas del país centroamericano.
La afición de Lankester por la naturaleza, y de manera especial por las orquídeas, dio lugar a la creación de un jardín privado en los terrenos que su familia había adquirido en la provincia de Cartago para dedicarlos al negocio cafetalero.
Esos terrenos, con su vasta colección de orquídeas, fueron donados a la UCR en marzo de 1973 y convertidos luego en un botánico.
Situado a 26 kilómetros de la capital de Costa Rica, el Jardín Botánico Lankester se destaca como “una de las más productivas unidades de investigación de la universidad, prolífica en publicaciones científicas, referente internacional de primera línea para el estudio y la conservación de las orquídeas y plantas del Neotrópico”, informa la UCR en su página web.
Y es una parada obligada para los amantes de la naturaleza que visitan Cartago.
Colecciones
Miles de orquídeas: El Jardín Botánico Lankester se destaca por la conservación de orquídeas. Tiene cerca de 18,000 en exhibición y cultiva casi 1,000 especies de la familia Orchidaceae.
La institución, cuyos científicos han descubierto cientos de especies de orquídea, presenta una exposición de estas plantas durante la III cumbre de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (Celac) que se celebra hasta hoy en Costa Rica.
Cactus y suculentas: Los amantes de los cactus pueden apreciar aquí agaves, crasuláceas o suculentas y liliáceas.
Especies de plantas: Aunque se destaca por su colección de orquídeas, en el Jardín Botánico Lankester hay espacio para otras especies. En sus más de diez hectáreas existen zonas dedicadas a las bromelias, cactus y suculentas, heliconias, bambúes, palmas y al bosque secundario.
El jardín japonés, con su emblemático puente rojo, es escenario de eventos sociales y locación predilecta para sesiones fotográficas.
