Farándula

DUQUES DE SUSSEX

Enrique y Meghan, flechazo, cuento de hadas y rebelión

Los duques de Sussex, foto de archivo. / Listín

Su historia comenzó con un flechazo, pero el cuento de hadas se convirtió en un suplicio para la pareja principesca que decidió renunciar a sus funciones reales. Cinco etapas clave en la relación de Enrique y Meghan.

-Amor a primera vista-

El príncipe Enrique tenía 31 años, varios fracasos amorosos y una carrera militar de 10 años detrás de él cuando conoció a Meghan Markle, una actriz estadounidense divorciada que entonces tenía 34.

Su primer encuentro fue organizado por una amiga en común durante un viaje de Meghan a Londres, en julio de 2016. Alquimia inmediata.

"Todo era perfecto", dijo el príncipe Enrique en una entrevista en la BBC a finales de noviembre de 2017, poco después del anuncio de su futura boda.

Durante los primeros cinco o seis meses, mantuvieron su romance en secreto. Enfrentado los rumores, el príncipe formalizó su relación en noviembre de 2016.

Le pidió a Meghan que se casara con él un año después en su cabaña en Londres.

-Matrimonio de hadas-

Los esponsales son saludados por la prensa británica, que primero vio en Meghan un soplo de aire fresco para la familia real. Una mujer que lleva su propia carrera, susceptible de aportar modernidad a una institución envuelta en la tradición.

La pareja se casó el 19 de mayo de 2018 en el castillo de Windsor, a unos 40 kilómetros al oeste de Londres, en una ceremonia retransmitida en todo el mundo, combinando el esplendor de la monarquía británica con los acentos de la cultura afroamericana, ante una pléyade de estrellas y en la alegría popular.

Meghan se convirtió en el primer miembro de la familia real con un padre blanco y una madre negra.

-Bebé real-

Meghan da a luz al primer hijo de la pareja, Archie Harrison Mountbatten Windsor, el 6 de mayo de 2019.

La pareja, que vivía antes del nacimiento en el palacio de Kensington, en Londres, lugar de residencia de Guillermo y Catalina, se había instalado en abril en la casa de Frogmore, mucho más grande, situada en las tierras del castillo de Windsor.

"Tengo los dos mejores chicos, así que estoy muy contenta", dijo Meghan al presentar a su bebé, que no tiene título real.

Caída del pedestal--

La pareja pierde progresivamente su lustre, a medida que las críticas se intensifican en la prensa, que les reprocha disfrutar de un estilo de vida muy cómodo, rechazando al mismo tiempo los inconvenientes.

Se quejan de la presión de los medios de comunicación, pero renuevan su casa de Frogmore a costa de los contribuyentes.

Los periódicos también les reprochan su hipocresía, ya que Enrique y Meghan utilizan aviones privados para sus vacaciones al mismo tiempo que defienden causas ambientales.

También hay rumores persistentes sobre el comportamiento caprichoso de la Duquesa de Sussex, tras una serie de dimisiones del personal de la Casa Real.

-Retirada-

Ante las críticas, el príncipe primero subió el tono, demandando a los periódicos. Luego se peleó en un documental sobre la presión mediática y la brecha con su hermano Guillermo.

Antes de tomar distancia viajando unas semanas a Estados Unidos y Canadá.

En un anuncio impactante el miércoles, que tomó por sorpresa a la familia real, Enrique y Meghan renunciaron a su papel real de liderazgo para tomar su independencia financiera y establecerse parte del año en Norteamérica.

Quieren fundar una organización benéfica.