Interceptan 414 kilos de cocaína en una embarcación al oeste de Puerto Rico
De acuerdo a las autoridades, la tripulación del Interceptor Costero del municipio de Mayagüez, en el oeste de Puerto Rico, recibió información sobre una embarcación sospechosa que se dirigía hacia el este, hacia la costa oeste de la isla.
Agencias federales y puertorriqueñas incautaron este miércoles un cargamento de 414 kilogramos de cocaína, valorada en 9,5 millones de dólares, en una embarcación en la que viajaban dos puertorriqueños en aguas de la isla de Desecheo, en el oeste de Puerto Rico.
"Las organizaciones criminales buscan traficar tanto de migrantes como de contrabando a través de la costa occidental de Puerto Rico", afirmó en un comunicado Creighton Skeen, director interino de Operaciones Aéreas y Marítimas de la Rama Aérea y Marítima del Caribe (CAMB, por sus siglas en inglés).
"Operaciones Aéreas y Marítimas (AMO, por sus siglas en inglés) continúa utilizando sus recursos, tecnología y conocimiento del dominio marítimo para garantizar que haya una consecuencia por violar las leyes de Estados Unidos", añadió Skeen.
De acuerdo a las autoridades, la tripulación del Interceptor Costero del municipio de Mayagüez, en el oeste de Puerto Rico, recibió información sobre una embarcación sospechosa que se dirigía hacia el este, hacia la costa oeste de la isla.
Los agentes localizaron una embarcación blanca con consola central del Cabo de Hornos cerca de Desecheo con dos ocupantes a bordo.
La tripulación escoltó la embarcación hasta el embarcadero de Mayagüez para su inspección, donde los agentes de interdicción marítima encontraron un compartimento oculto lleno de 350 paquetes con forma de ladrillo.
La sustancia en polvo blanca contenida en el campo de ladrillos dio positivo en las propiedades de cocaína.
La Administración para el Control de Drogas (DEA, por sus siglas en inglés) asumió la custodia de los individuos y el contrabando para una mayor investigación y posterior procesamiento.
"Estos individuos representan la mayor amenaza para la seguridad y la salud de nuestros ciudadanos", afirmó la agente especial a cargo de la División del Caribe de la DEA, Denise Foster.
Puerto Rico es, debido a su ubicación estratégica, un punto de transbordo para el contrabando de drogas ilegales a EE.UU. procedentes de América Central y del Sur y otros países caribeños.