aborto
Francia, a un paso de blindar el aborto en la Constitución
El derecho al aborto registró retrocesos en los últimos años en Europa, como en Hungría y Polonia.
Francia podría convertirse el próximo lunes en el único país en blindar constitucionalmente la "libertad garantizada" de abortar, que este miércoles superó el último escollo de un largo proceso nacido tras las restricciones impuestas en Estados Unidos en 2022.
El Senado dio el visto bueno a esta reforma constitucional, ya aprobada por la Asamblea Nacional (cámara baja) el 30 de enero, despejando la incertidumbre que planeaba y allanando el camino al simbólico voto final.
Este tendrá lugar el lunes, cuando ambas cámaras se reúnan en un Congreso extraordinario en Versalles, al suroeste de París, convocado por el presidente Emmanuel Macron para volver "irreversible" ese derecho.
"Cuando los derechos de las mujeres son atacados en todo el mundo, Francia se levanta y ocupa su lugar en la vanguardia del progreso", celebró el primer ministro, Gabriel Attal, en la red social X.
Salvo sorpresa, el resultado será favorable. La inscripción necesita una mayoría de tres quintas partes de los presentes y, de los 925 legisladores franceses, 760 ya dieron su visto bueno en los votos unicamerales.
"Hemos suscitado inmensas esperanzas en todo el mundo. Hoy, las mujeres polacas, húngaras, estadounidenses, iraníes y argentinas miran a Francia con admiración", dijo la senadora ecologista Mélanie Vogel.
Mujeres y democracia
En Francia, el aborto fue despenalizado en 1975 por una ley promovida por la ministra Simone Veil, icono de la emancipación femenina y superviviente del Holocausto. En 2022, se extendieron los plazos hasta las 14 semanas.
Aunque el aborto no está realmente cuestionado en Francia --en 2022 se practicaron 234,300 interrupciones voluntarias del embarazo--, la decisión de la Corte Suprema de Estados Unidos de dejar de reconocer el aborto como un derecho federal activó las alarmas en el país.
En noviembre de 2022, la Asamblea Nacional francesa aprobó una iniciativa de la oposición de izquierda radical de inscribir en la Constitución de 1958 el aborto como un "derecho".
Pero el Senado abogó en febrero de 2023 por blindarlo como una "libertad". Tras fracasar este primer intento, Macron retomó la reforma y propuso "libertad garantizada", como consenso.
La oposición de derecha y centro, que controla el Senado, tampoco estaba convencida por ese término, pero acabó cediendo ante la presión social y política.
Con un 80% de los franceses que apoyan esta reforma, según los sondeos, "si voto en contra, mis hijas ya no vienen por Navidad", reconoció una legisladora, que pidió el anonimato.
Tanto asociaciones de defensa de los derechos de las mujeres como colectivos antiabortistas manifestaron este miércoles en las inmediaciones del Senado para mantener la presión.
En su visita en septiembre a Marsella, en el sur de Francia, el papa Francisco deploró el destino de "los niños no nacidos, rechazados en nombre de un falso derecho al progreso".
El derecho al aborto registró retrocesos en los últimos años en Europa, como en Hungría y Polonia, y sigue prohibido en un puñado de países, sobre todo de América Latina como El Salvador, Nicaragua, Honduras, Haití y República Dominicana.
"Una democracia no puede controlar su destino si las mujeres que viven en ella no tienen la libertad de controlar el suyo", dijo el ministro de Justicia, Éric Dupond-Moretti, celebrando que Francia se convierta en el "primer país del mundo" en blindar el aborto en su Carta Magna.