DeSantis pide mandar a la Marina a puertos mexicanos para impedir la entrada de químicos para fabricar fentanilo
DeSantis ha presentado así su propuesta política en materia de inmigración, que incluye la utilización de la Marina y la Guardia Costera para bloquear los puertos mexicanos
El gobernador de Florida y precandidato presidencial republicano Ron DeSantis, ha planteado este lunes desde la frontera con México la necesidad de enviar a la Marina y a la Guardia Costera a los puertos mexicanos para impedir la entrada en el país de los productos químicos necesarios para la fabricación de la droga de fentanilo.
Estados Unidos "se reserva el derecho a intervenir atravesando la frontera para que nuestro territorio esté a salvo de las actividades de los cárteles mexicanos", ha advertido DeSantis en un acto celebrado en Eagle Pass, Texas.
DeSantis ha presentado así su propuesta política en materia de inmigración, que incluye la utilización de la Marina y la Guardia Costera para bloquear los puertos mexicanos "si el Gobierno mexicano no detiene la fabricación de droga por parte de los cárteles".
"Vamos a usar cada gramo de presión que tengamos a nuestra disposición contra México y todo nuestro poder contra los cárteles", ha asegurado con un tono con el que parece intentar superar por la derecha a su principal rival por la nominación del Partido Republicano, Donald Trump, en lo que se refiere a la política migratoria.
El pasado sábado DeSantis ya visitó la frontera de Texas, una zona a la que ha autorizado el envío de 1.100 miembros de las fuerzas de seguridad y de la Guardia Nacional de Florida y apoya formalmente la construcción del muro fronterizo.
En su discurso, DeSantis ha prometido trabajar con Panamá para "cerrar" el paso de Darién, una ruta por la jungla que permite a los migrantes viajar desde Colombia hacia Centroamérica para intentar llegar a Estados Unidos.
También ha anunciado que si gana las elecciones acabaría con la política de "detención y liberación", por la que los inmigrantes que soliciten asilo son puestos en libertad hasta que se resuelva su petición. En su lugar, la política pasaría a ser la de "espera en México".
Respecto a la Patrulla de Frontera ha anunciado que les subirá la remuneración para incrementar el número de agentes reclutando a exmilitares y expolicías y negando los visados a los países que no acepten las repatriaciones.
Igualmente ha prometido acabar con el derecho a la ciudadanía por nacimiento y endurecer las penas por tráfico de seres humanos o cortar toda la financación para las ONG "que fomentan la inmigración en masa".