Santiago Peña llama a la unidad de los paraguayos
Con el triunfo de Peña, el coloradismo se encamina a consolidar su hegemonía en el poder, después de siete décadas
El candidato del gobernante Partido Colorado, Santiago Peña, se proclamó ganador de las elecciones presidenciales celebradas este domingo en Paraguay, en una jornada en la que el oficialismo conquistó además la mayoría en el Senado y se impuso en al menos quince de las diecisiete gobernaciones en disputa, según el conteo provisional oficial.
"Convoco a la unidad y al consenso para alcanzar nuestro destino de bienestar colectivo y de prosperidad sin exclusiones. Ha llegado el tiempo de postergar nuestras diferencias, para priorizar las causas comunes que nos unen como nación", dijo un emocionado Peña en un discurso ante decenas de seguidores de su partido en Asunción.
Flanqueado por la cúpula del Partido Colorado-Asociación Nacional Republicana (ANR), Peña dedicó parte de su intervención al líder del oficialismo y su mentor político, el exmandatario Horacio Cartes (2013-2018), sin que anticipara de inmediato las acciones que adoptará cuando asuma el Ejecutivo en agosto próximo.
"Gracias mi querido Partido Colorado, vamos a honrarte hasta el último segundo de nuestra gestión", afirmó el futuro gobernante, quien también elogió a los cientos de miles de paraguayos que "confiaron en este proyecto conciliador y patriótico".
"Desde mañana empezaremos a diseñar el Paraguay, que todos queremos sin groseras desigualdades ni injustas asimetrías sociales", añadió este economista.
Anticipó que la tarea por hacer "no es para una sola persona o solo para un partido", después "de los últimos años de estancamiento económico, de déficit fiscal, con un preocupante índice de desocupados y el aumento de la pobreza extrema".
Peña tomará el testigo al actual presidente del Paraguay, Mario Abdo Benítez, también del Partido Colorado, y quien fue antecedido en el cargo por Cartes.
Con el triunfo de Peña, el coloradismo se encamina a consolidar su hegemonía en el poder, después de siete décadas.
Unos 4,8 millones de paraguayos estaban convocados este domingo a las urnas para unos comicios generales en los que también se eligió diputados y concejales, y en las que el país decidía entre la consolidación del continuismo con el Partido Colorado o la alternancia política.