Ex primer ministro francés Édouard Philippe lanzará su candidatura a la presidencia en el 2027
Philippe, de 53 años y primer ministro de Macron entre mayo de 2017 y julio de 2020, confirmó así una hipótesis que se daba casi por segura en la política francesa desde su salida del Gobierno
El ex primer ministro francés Édouard Philippe anunció este martes que será candidato al Elíseo en las próximas elecciones presidenciales en Francia, que están previstas para el año 2027, cuando terminará el segundo mandato de cinco años de Emmanuel Macron.
Philippe, de 53 años y primer ministro de Macron entre mayo de 2017 y julio de 2020, confirmó así una hipótesis que se daba casi por segura en la política francesa desde su salida del Gobierno, ocurrida justo tras los primeros meses de la pandemia de la covid-19.
"Los franceses decidirán", manifestó en una entrevista publicada este martes por el semanario Le Point.
Philippe, que actualmente se desempeña como alcalde de El Havre (norte) y como presidente del partido Horizons (que es uno de los bloques que integran el macronismo), aseguró que prepara ya sus proposiciones electorales y que lo que tendrá para proponer "será enorme".
Se definió como un hombre de derechas -se integró al macronismo procedente del partido conservador denominado actualmente Los Republicanos-, pero aseguró que no piensa realmente en "etiquetas".
"Si te sientes prisionero de tu etiqueta no vas muy lejos", manifestó.
El anuncio de Philippe llegó en un momento de incertidumbre política exacerbada por la ausencia de un nuevo gobierno desde las elecciones legislativas anticipadas del 7 de julio pasado, que dejaron una Asamblea Nacional profundamente dividida.
A la espera de que Macron decida a quién nombrará como primer ministro, Philippe aseguró que desde la fuerza política que él fundó en 2021 está dispuesto a apoyar a candidatos salidos de espacios políticos que van "de la derecha conservadora a la socialdemocracia".
También, consideró que la coalición de izquierdas del Nuevo Frente Popular (NFP), que reclama con una escasa mayoría relativa la capacidad de gobernar, está mucho más limitada para lograr pactos que el centro.
"La derecha debe involucrarse", pidió también, ya que si sus antiguos colegas de partido no se comprometen con el centro macronista, "precipita el conjunto hacia la izquierda".