Más del 67% de los italianos entre 18 y 34 años aún vive con sus padres
Según Istat, la pobreza absoluta llegó en 2023 a un nivel nunca visto en los últimos diez años.
Más del 67% de italianos entre 18 y 34 años vive aún con los padres, según el informe anual de la situación del país del Instituto Nacional de Estadística (Istat) publicado este miércoles, en un contexto en que la pobreza afecta a casi 10 % de población, alcanzando niveles nunca vistos en la última década.
La economía de Italia creció en 2023, un aumento del 0,9 % del PIB, y volvió por primera vez a niveles de 2007, previos a la crisis, pero esto no se traduce en una reducción de la pobreza o precariedad, sobre todo entre jóvenes, en su mayoría sin capacidad para independizarse y en muchos casos con trabajos a tiempo parcial.
Un 67,4 % de los ciudadanos entre 18 y 34 años siguen viviendo con sus padres, una cifra que subió ocho puntos durante las últimas dos décadas, en comparación con el 59,7 % de 2002. La tendencia se agrava en zonas del sur y el nivel más alto es en la región de Campania, donde un 75,4% de los jóvenes residen aún en el domicilio familiar.
Según Istat, la pobreza absoluta llegó en 2023 a un nivel nunca visto en los últimos diez años: el 9,8 % de italianos son pobres, así como el 8,5 % de familias. Implica que unas 5,7 millones de personas de una población total de unos 59 millones vivan en la pobreza.
Este porcentaje sube casi al 12 % entre jóvenes de entre 18 y 34 años, y en los menores asciende al 14 %, lo que hizo que la ONG Save The Children tachara esta realidad como algo de "especial alarma".
La precariedad y faltas de perspectivas laborales también afectan en especial medida a este sector de población: la mitad de los más de tres millones de contratos de duración limitada existentes en el mercado laboral son para jóvenes de entre 15 y 24 años.
En algunas regiones del sur como Campania o la isla de Sicilia, donde el porcentaje de jóvenes que viven con los padres es más alto, la tasa de paro entre esta franja de población alcanza el 30%.
En otra tendencia patente en Italia desde hace años, la franja de población joven sigue disminuyendo en un acusado descenso demográfico que muestra el gradual envejecimiento, de acuerdo con ISTAT.
En total, 10,3 millones de ciudadanos italianos tenían entre 18 y 34 años en 2023, una reducción con los más 13,3 millones de 2002 y un declive en relación a los alrededor de cinco millones de 1994.