Exjefe de AUC asegura que Petro y el canciller eran objetivos militares de los paramilitares

El exjefe de las Autodefensas Unidas de Colombia (AUC) Salvatore Mancuso aseguró este martes que el Departamento Administrativo de Seguridad (DAS), la extinta policía secreta colombiana, establecía lista de objetivos militares que les entregaban a los paramilitares, entre los que se encontraban el actual presidente, Gustavo Petro, y el canciller, Álvaro Leyva.

"El mismo canciller hoy Álvaro Leyva, el mismo presidente Gustavo Petro fueron parte de los objetivos militares que nos entregaba el señor José Miguel Narváez (director de Inteligencia)", dijo Mancuso, quien participa de forma virtual en el último día de audiencia de aportación de verdad ante la Jurisdicción Especial para la Paz (JEP).

Mancuso se refirió así a una lista de supuestos objetivos militares que les entregaban desde entidades estatales: "A nivel central se definían objetivos y eran objetivos para las Autodefensas", apuntó.

puestos de poder

En esa lista "consideraba especialmente a aquellos que iban a acceder a puestos de poder de cargo público, político" porque creía que "hacían parte de las estructuras (guerrilleras)" a través del plan de la guerrilla, según el relato, de que "en algún momento al no poderse tomarse el poder con las armas lo harían por el ejercicio democrático de la política".

Así, para el controversial DAS -que fue desarticulado justamente por las prácticas de espionaje y órdenes de asesinato contra disidentes políticos y oposición- y algunos miembros de la cúpula militar, "todo lo que tuviese que ver con izquierda, él lo consideraba un enemigo de la nación colombiana", según Mancuso.

En esa lista estaba Petro, quien en ese entonces ya ejercía como congresista de la oposición, y también el actual canciller, quien estuvo muy metido en procesos de negociación con las FARC y comprometido con buscar la paz para Colombia.

acabar a las guerrillas

Narváez, según lo declarado por Mancuso desde la prisión donde está retenido en EE.UU., decía que "Leyva era un vocero miembro de la guerrilla, que Leyva Durán era una persona que desde siempre había defendido los intereses de la guerrilla, que hacía daño al país con esto porque con las guerrillas no se podía negociar, a las guerrillas lo que había era acabarlas".

En la lista también aparecen otros nombres como los actuales senadores por el partido oficialista Pacto Histórico Alirio Uribe (quien formaba parte de la organización de derechos humanos Colectivo de Abogados José Alvear Restrepo) y la senadora Piedad Córdoba.

Para el subdirector del DAS, según Mancuso, fue un error que las AUC liberaran a Córdoba después de secuestrarla en 1999 porque aseguraba que a "Piedad había que asesinarla, que había que actuar militarmente contra ella".

El nombre de Narváez, quien fue subdirector del DAS en 2005, ha salido varias veces durante la comparecencia de Mancuso, que ha ligado el actuar de las AUC a los mandatos y directrices de la cúpula militar y de esta agencia de Inteligencia.

Narváez "siempre estuvo a las órdenes nuestras igual que nosotros a las del DAS para lo que tuviera que ver con esta lucha que supuestamente estábamos librando".

Embajador Gallón

En la audiencia del lunes, que se desarrolla en Montería abierta al público y con asistencia de víctimas pero Mancuso interviene a través de una pantalla, el exparamilitar ya reveló que las AUC estuvieron a punto de asesinar al actual embajador del país ante la ONU en Ginebra, Gustavo Gallón, por órdenes del Estado.

"El señor Gustavo Gallón no fue asesinado por las Autodefensas porque Carlos Castaño vio las enormes repercusiones que tuvieron estos hechos (el asesinato del periodista humorista Jaime Garzón)", dijo Mancuso, que hoy alargó esa lista con nuevos nombres.

Garzón fue asesinado el 13 de agosto de 1999 en Bogotá por sicarios mandados por el entonces jefe de las paramilitares Autodefensas Unidas de Colombia (AUC), Carlos Castaño, en un crimen por el que ha sido condenado Narváez en la justicia ordinaria.

La comparecencia de Mancuso, la "última oportunidad" que le da la JEP, se desarrolla en Montería, capital del departamento de Córdoba (norte), y el exjefe paramilitar deberá "superar el umbral de verdad alcanzado en 18 años de investigaciones (de la Ley) de Justicia y Paz, y en la justicia ordinaria".

Este tribunal especial creado por el acuerdo de paz con las FARC solo juzga crímenes de lesa humanidad cometidos por la guerrilla y la fuerza pública, pero puede incluir a terceros civiles, como es este caso, si tienen relación con los anteriores.