La calma vuelve a Gaza e Israel tras cinco días de enfrentamientos
Desde el martes, los enfrentamientos entre Israel y grupos armados de Gaza costaron la vida a 34 palestinos
La calma volvió este domingo a la Franja de Gaza y a Israel, donde la entrada en vigor de un alto el fuego puso fin a cinco días de enfrentamientos que dejaron 35 muertos.
El Cogat, el organismo del ministerio de Defensa israelí que supervisa las actividades civiles en los territorios palestinos, anunció el domingo "la reapertura parcial y progresiva" de los pasos fronterizos de Erez, que permiten a los palestinos transitar por Israel.
También se abrió Kerem Shalom, único punto de paso israelí para llevar mercancía hacia la Franja de Gaza, un empobrecido y exiguo territorio palestino controlado por el movimiento islamista Hamás y donde viven 2,3 millones de personas.
"La apertura completa" será posible tras nuevas valoraciones de la situación, añadió en un comunicado.
Desde el martes, los enfrentamientos entre Israel y grupos armados de Gaza costaron la vida a 34 palestinos, y unas 190 personas resultaron heridas en el enclave, según el ministerio de Sanidad palestino.
Del lado israelí, una octogenaria murió el jueves en Rehovot, en el centro de Israel, y 30 personas resultaron heridas.
La tregua que negoció Egipto, mediador tradicional entre el ejército israelí y los grupos armados palestinos de Gaza, entró en vigor el sábado a las 22H00 (19H00 GMT).
Pero a pesar del alto el fuego, un cohete fue lanzado el domingo hacia Israel, aunque cayó en un terreno baldío, según un comunicado del ejército israelí.
El papa Francisco expresó en su tradicional misa dominical en el Vaticano su esperanza de que se llegue a un alto el fuego más duradero, "porque las armas no aportarán seguridad ni estabilidad".
En la Franja de Gaza, los habitantes lamentaron los daños causados por los ataques israelíes, que destruyeron 51 viviendas y obligaron al desplazamiento de unas 950 personas según la ONU.
"Estamos en la calle, no hay casa para mis hijos", declaró a la AFP Mohammed al Louh, de 69 años, cuya casa fue destruida el sábado en el campo de refugiados de Nuseirat (centro).
"Pedimos a las autoridades pertinentes que nos apoyen y nos den un indemnización y una vivienda", respaldó un familiar.
"Volvemos a respirar"
Las autoridades israelíes levantaron el domingo las restricciones de movimiento de los habitantes de zonas limítrofes, que pasaron varios días encerrados en refugios por los cohetes lanzados desde la Franja de Gaza.
"Tuvimos mucho miedo", contó Yael en la ciudad costera de Ascalón. "Estar encerrado en casa durante cuatro días es muy difícil (...), ahora volvemos a respirar", añadió la mujer de 60 años.
Israel y la Yihad Islámica, un grupo considerado como "organización terrorista" por el Estado hebreo, la Unión Europea y Estados Unidos, acordaron respetar el alto el fuego, advirtiendo que no dudarían en retomar la violencia ante el incumplimiento del mismo.
El primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, celebró el domingo un alto el fuego "perfectamente" ejecutado. "Hoy, los enemigos de Israel en Gaza y más allá saben que aunque intenten esconderse, podemos y vamos a alcanzarlos", declaró al comienzo de una reunión de gabinete.
En territorio palestino, la Yihad Islámica, advirtió a Israel contra "toda acción estúpida o asesinato de comandantes de la resistencia palestina".
El secretario general de la ONU, António Guterres, saludó el domingo el acuerdo de cese el fuego y ofreció su "más profundas condolencias" a las familias de las víctimas, según un comunicado emitido por su portavoz, Stephane Dujarric.
Guterres también elogió a Egipto por su "papel clave en terminar con las hostilidades" y a Catar, Líbano y Estados Unidos, destacó Dujarric.
El secretario además "invitó a todas las partes a monitorear el cese", añadió el comunicado.
Detenciones en Cisjordania
La calma volvió a Gaza, pero hubo enfrentamientos en Cisjordania, territorio palestino ocupado por Israel desde 1967.
El ejército indicó además la detención en Naplusa de dos palestinos sospechosos de haber disparado contra las fuerzas de seguridad, hiriendo a dos soldados el 25 de marzo en Huwara.
La mortífera escalada de esta semana es el mayor brote de violencia entre ambas partes desde agosto de 2022.
Entre los palestinos muertos figuran seis comandantes de la Yihad Islámica, así como combatientes de ese movimiento y del Frente Popular para la Liberación de Palestina (FPLP), otro grupo armado.
La Oficina de la Coordinación de Asuntos Humanitarios de Naciones Unidas (OCHA) confirmó la muerte de al menos 13 civiles, siete de ellos menores. El ejército israelí afirma que cuatro civiles, tres de ellos menores, murieron por cohetes palestinos que cayeron dentro de la Franja.
Según un oficial del ejército israelí, los palestinos dispararon 1.468 proyectiles hacia el territorio israelí, incluido 1.139 que atravesaron el espacio aéreo israelí. El ejército logró interceptar 430 de ellos.