Británicos continúan las celebraciones por coronación de su rey

En las celebraciones de ayer domingo por la coronación del rey Carlos III cualquiera podía portar una corona, inclusive un perro.

Un día después del espectáculo de la coronación del rey Carlos III en una antigua ceremonia religiosa, las festividades tomaron un giro más realista con miles de picnics y fiestas callejeras celebradas en toda Gran Bretaña en su honor, sin necesidad de invitaciones de lujo.

Bajo un frondoso toldo verde en el Regent’s Park de Londres, Valent Cheung y su novia se presentaron para vitorear al nuevo rey con los vecinos que les acogieron cuando se mudaron de Hong Kong. Para la ocasión, engalanaron a Tino, su leal y “real” perro blanco y esponjoso, con una pequeña corona púrpura.

una nueva era

“Esta es una nueva era para Gran Bretaña”, dijo Cheung. “En Hong Kong no teníamos estas cosas. Ahora acogemos la cultura. Queremos disfrutarla, queremos celebrarla”.

Desde las pequeñas aldeas hasta la capital, la bandera británica colgaba de las casas y ondeaba de mesas y árboles para celebrar al recién coronado rey. Se estampó en servilletas y manteles, sombreros y lazos. Algunos vestían los colores de la bandera como un uniforme: vestidos de rojo, blanco y azul de la cabeza a los pies y hasta las uñas.

Las reuniones comunitarias, parte de una tradición británica conocida como el Gran Almuerzo, pretendían reunir a los vecinos para celebrar la coronación, aun cuando el apoyo a la monarquía disminuye. Los críticos se quejaron del coste de la coronación en un momento de gastos de manutención exorbitantes en medio de una inflación de dos dígitos.

El domingo se organizaron miles de almuerzos como parte de las celebraciones, junto con un concierto nocturno en el castillo de Windsor en el que actuaron Katy Perry, Lionel Richie y la banda de chicos de los noventa Take That. Carlos animó a los residentes a participar en actividades de voluntariado el lunes, día que el Reino Unido declaró festivo.

El rey y la reina consorte, Camila, tienen previsto asistir al concierto, pero no acudieron a ninguno de los almuerzos, dejando eso a otros miembros de la familia real.