EE.UU.

Un acusado por asesinato de presidente haitiano se declara culpable en Miami

Foto de archivo.

El haitiano-chileno Rodolphe Jaar, uno de los acusados de participar en el asesinato del presidente haitiano Jovenel Moïse en julio de 2021, se declaró culpable de los cargos en su contra este viernes en Miami, según documentos judiciales.

Jaar, de 50 años, reconoció haber brindado "apoyo material y recursos" a sabiendas de que serían utilizados para secuestrar y matar al mandatario haitiano, según su declaración de culpabilidad.

Este empresario es el primero en declararse culpable entre los 11 imputados en Estados Unidos por planear la muerte de Moïse desde el sur de Florida.

El mandatario haitiano fue asesinado a tiros por un comando de mercenarios colombianos en su residencia privada de Puerto Príncipe sin que intervinieran sus guardaespaldas. Tenía 53 años.

Según la acusación, Jaar alojó a los colombianos y les proporcionó armas.

Al declararse culpable, este exinformante de la agencia estadounidense antidrogas se compromete a colaborar con la investigación, con la esperanza de ver reducida una condena que podría ser la cadena perpetua.

El asesinato de Moïse se debió a las ansias de dinero y de poder de varios de los inculpados en Estados Unidos, según declaró el 15 de febrero el fiscal Markenzy Lapointe en una rueda de prensa en Miami.

Ese día, Lapointe anunció el arresto de cuatro sospechosos en la muerte del presidente haitiano, entre ellos el venezolano Antonio Intriago y el colombiano Arcángel Pretel Ortiz.

La investigación estadounidense desveló que Intriago y Ortiz, gestores de la firma de seguridad CTU en Miami, idearon un plan para secuestrar a Moïse y sustituirlo por Christian Sanon, un ciudadano estadounidense-haitiano que quería presidir el país caribeño.

Lo hicieron a cambio de firmar contratos lucrativos para construir infraestructuras y prover fuerzas de seguridad y equipamientos militares a un futuro gobierno liderado por Sanon, también inculpado en Estados Unidos.

Tras no lograr secuestrar a Moïse, los instigadores de la trama decidieron supuestamente asesinarlo con un comando de 20 colombianos contratados por CTU.