Europa

Miles protestan en Grecia por víctimas del choque de trenes

Foto: AP

Las protestas se han intensificado en Grecia días después de la catástrofe ferroviaria más mortífera en la historia del país, al salir miles de estudiantes a las calles en varias ciudades y registrarse choques de manifestantes con la policía en Atenas.

Al menos 57 personas —entre ellas varios estudiantes universitarios— murieron cuando un tren de pasajeros chocó contra uno de carga el martes poco antes de la medianoche. El gobierno ha atribuido el accidente a un error humano, y un funcionario ferroviario enfrenta cargos de homicidio involuntario.

La violencia del viernes por la noche no estuvo muy extendida, y por lo demás las protestas fueron pacíficas. En Salónica, la segunda ciudad más grande de Grecia, también hubo enfrentamientos.

En Atenas, policías antidisturbios frente al Parlamento lanzaron gases lacrimógenos y granadas de aturdimiento para dispersar a un reducido número de manifestantes que les arrojaron bombas molotov, le prendieron fuego a contenedores de basura y desafiaron los cordones policiales. No se registraron detenciones ni heridos.

Las protestas, convocadas por grupos estudiantiles y de izquierda, se vieron azuzadas por lo que se considera es una falta de medidas de seguridad en la red ferroviaria griega. La manifestación más multitudinaria tuvo lugar el viernes en la ciudad de Larisa, cerca del lugar del accidente, donde varios miles de personas se manifestaron pacíficamente. El miércoles y el jueves se llevaron a cabo protestas similares.

El primer funeral en el norte de grecia

El accidente en Tempe, 380 kilómetros (235 millas) al norte de Atenas, conmocionó al país y evidenció las deficiencias de seguridad de la pequeña pero anticuada red ferroviaria.

Mientras los equipos de recuperación pasaban un tercer día revisando los restos del desastre y las familias empezaban a recibir los restos de sus seres queridos, en el norte de Grecia se celebró el funeral de la primera de las víctimas.

Athina Katsara, de 34 años y madre de un niño, fue enterrada en Katerini, su ciudad natal. Su marido estaba hospitalizado y no pudo asistir.

Angustioso proceso de identificación

La fuerza del choque de frente y el incendio resultante complicaron la tarea de determinar el número de muertos. Las autoridades trabajaron sin descanso para comparar partes de cadáveres desmembrados y quemados con muestras de tejido con el fin de determinar la cifra.

Los cuerpos fueron entregados a familias en ataúdes cerrados después de la identificación de las víctimas a través de muestras de ADN de los familiares, un proceso que se siguió con todos los restos.

Familiares de los pasajeros que aún siguen desaparecidos esperaban los resultados de las pruebas afuera de un hospital en Larisa. Entre ellos estaba Mirella Ruci, cuyo hijo Denis, de 22 años, continúa desaparecido.

“Mi hijo no aparece en ninguna lista oficial hasta ahora y no tengo información. Le ruego a cualquiera que lo haya visto, en el vagón 5, asiento 22, que se comunique conmigo si lo llegó a ver”, dijo Ruci a los periodistas, haciendo un esfuerzo para que no se le quebrara la voz.

Banderas a media asta

Las banderas de la antigua Acrópolis, el Parlamento y otros edificios públicos de Grecia permanecieron a media asta en el tercer día de luto nacional. El servicio ferroviario griego siguió en huelga por segundo día consecutivo, y se prevén más paros el fin de semana.

La policía registró una oficina de coordinación ferroviaria en Larisa a primera hora del viernes y retiró evidencia, parte de una investigación en curso. El director de la estación, de 59 años, fue detenido y acusado de varios cargos de homicidio por negligencia.

Stelios Sourlas, abogado que representa a una víctima de 23 años de la colisión, dijo que la responsabilidad por las muertes iba más allá del director de la estación.

“El jefe de estación puede ser el principal responsable... pero la responsabilidad también es más amplia: están los operadores ferroviarios y los funcionarios públicos cuya labor era garantizar que las medidas y procedimientos de seguridad se aplicaran correctamente”, manifestó Sourlas.

Los sindicatos ferroviarios dicen que el mantenimiento de la red es deficiente, a pesar de las mejoras de los últimos años para ofrecer trenes más rápidos.