Ucrania afirma haber derribado una nueva oleada de drones contra Kiev
Ucrania afirmó el miércoles que derribó toda una salva de drones lanzados de madrugada por Rusia contra Kiev, en un nuevo ataque de Moscú que busca destruir sus infraestructuras energéticas.
El presidente ucraniano, Volodimir Zelenski, se congratuló por la eficacia de sus fuerzas antiaéreasy precisó que los 13 drones Shahed, de fabricación iraní, que lanzaron las fuerzas rusas fueron abatidos.
"Los terroristas comenzaron esta mañana con 13 (drones) Shahed (...) Según las primeras informaciones, la totalidad de los 13 fueron derribados por nuestro sistema de defensa aérea", dijo.
"Estoy orgulloso", agregó el mandatario en un video difundido en redes sociales.
El Kremlin, por su parte, descartó este miércoles la idea de una tregua de Navidad o de Año Nuevo en el terreno.
"No se ha recibido ninguna propuesta de nadie y este tema no está en la agenda", declaró el portavoz de la presidencia rusa, Dmitri Peskov, preguntado sobre la posibilidad de una interrupción de los combates.
Siete millones de niños
En el oeste de Kiev, periodistas de la AFP observaron un edificio con el techo parcialmente arrancado. La policía y los equipos de emergencia estaban trabajando en el área.
Restos de los aparatos derribados cayeron sobre edificios administrativos y de viviendas, según la administración militar de Kiev.
"No hubo heridos", dijo el jefe de la administración militar, Serguéi Popko, en Telegram.
El techo de un edificio cedió en gran parte y en su interior, en el suelo cubierto de nieve, se amontonan ladrillos, maderas y chatarra.
"El invierno llega. ¿Cómo la gente puede sobrevivir?", se preguntó Svetlana, que vio uno de los drones antes de que detonara. "No dejan vivir a los ucranianos", lamentó.
Desde octubre, tras una serie de fracasos militares en el terreno, las fuerzas rusas lanzan ataques masivos con drones explosivos y misiles.
El objetivo es destruir las infraestructuras energéticas de Ucrania y dejar a millones de personas a oscuras y en el frío en pleno invierno.
Los bombardeos rusos contra estos centros energéticos conllevan riesgos en el desarrollo para "casi todos los niños en Ucrania", es decir casi siete millones de menores, advirtió el miércoles el Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (Unicef).
"La situación del sistema energético de Ucrania sigue siendo difícil", reiteró por su parte el operador nacional, Ukrenergo.
Según la empresa, el este es la zona más afectada porque los bombardeos son "casi diarios". "Las obras de reparación van lentas debido al peligro por la vida de los empleados".
El anterior ataque masivo de Moscú contra blancos energéticos ucranianos fue el 5 de diciembre.
Pese a la indignación internacional que han suscitado estos ataques, el presidente ruso, Vladimir Putin, prometió que estos bombardeos seguirían.
La oleada de drones del miércoles tiene lugar un día después de una conferencia internacional en París que recaudó más de 1.000 millones de euros (1.055 millones de dólares) para ayudar a Ucrania durante el invierno.
Tribunal especial
La presidencia ucraniana indicó el miércoles que 64 de sus soldados habían sido liberados, junto a un ciudadano de Estados Unidos, en un nuevo canje de prisioneros con Rusia.
Según la agencia de noticias rusa Tass, el estadounidense Suedi Murekezi fue detenido en junio en la región oriental de Donetsk, y fue acusado de participar en protestas antirrusas e incitar el odio étnico en Jersón (sur).
En el intercambio, también fueron "entregados" cuatro cadáveres, agregó la presidencia ucraniana.
En un discurso durante la entrega oficial al pueblo ucraniano del Premio Sájarov para la Libertad de Conciencia, concedido por el Parlamento Europeo, Zelenski reclamó de nuevo la creación de un tribunal especial "tan pronto como sea posible" para juzgar los crímenes de guerra rusos en Ucrania.
En el frente este, en la región de Donetsk, los combates de artillería seguían haciendo estragos, sobre todo cerca de la ciudad de Bajmut, prácticamente destruida, y Avdiivka, indicó la presidencia ucraniana.
Las autoridades de Kiev también afirmaron que las fuerzas rusas fueron repelidas en la región de Járkov, que el ejército ucraniano casi recuperó totalmente en septiembre.
Según la presidencia ucraniana, en la zona de la región de Jersón reconquistada en noviembre por Kiev -otro duro golpe para Moscú-, la artillería rusa siguió atacando las posiciones ucranianas y localidades pobladas.
Su gobernador, Yaroslav Yanushevich, dijo que estos bombardeos habían matado a un niño en esa ciudad.
Entretanto, los servicios de seguridad ucranianos (SBU) anunciaron el miércoles que estaban llevando a cabo registros en iglesias y monasterios ortodoxos pertenecientes a la iglesia rusa.
A principios de diciembre, Zelenski anunció que quería prohibir en Ucrania las organizaciones religiosas afiliadas a Rusia.