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Muere a los 97 años un médico que a los 75 cumplió su sueño de ser sacerdote

Un reconocido médico ortopedista y traumatólogo de Nicaragua que a los 75 años cumplió su sueño de ser sacerdote, murió este jueves a los 97 años por causas naturales, informaron sus familiares.

Jaime Granera Soto, nacido el 31 de enero de 1925, era un reconocido especialista en ortopedia y traumatología de la ciudad de León, en el noroeste de Nicaragua, cuando decidió cumplir el sueño de toda su vida, y se ordenó sacerdote en el año 2000.

Granera Soto dedicó 41 años de su vida exclusivamente a la medicina tras sacar su especialidad en el Bronx Municipal Hospital Center de Nueva York, en 1959, luego de pagar clases de inglés con lo que ganaba como médico. Los últimos 22 años los ofreció como sacerdote.

Su ordenamiento y responsabilidades sacerdotales no alejaron a Granera Soto totalmente de su profesión, que continuó ejerciendo y estudiando, principalmente en beneficio de personas pobres.

Conocido como un “notable humanista” o “maestro de generaciones” en León, a 97 kilómetros al noroeste de Managua, Granera Soto se encontraba delicado de salud desde el 31 de agosto pasado, por lo que había sido trasladado al estatal “Hospital Escuela Oscar Danilo Rosales Argüello”, donde, en el siglo pasado, fundó el departamento de Ortopedia y Traumatología.

Sus familiares no confirmaron si el sacerdote murió por causas relacionadas con su padecimiento de artritis degenerativa.

A lo largo de su vida, Granera Soto, quien nunca se casó ni tuvo hijos, recibió múltiples reconocimientos, entre ellos el Doctor Honoris Causa de la Facultad de Medicina de la Universidad Nacional Autónoma de Nicaragua (UNAN-León), y diversos homenajes de la sociedad médica nicaragüense.