EE.UU.

Estados Unidos y Arabia Saudita, una alianza estratégica salpicada por las crisis

Joe Biden visita este país el viernes por primera vez como presidente de Estados Unidos. Se reunirá con el príncipe heredero Mohamed Bin Salmán

Arabia Saudita y Estados Unidos están vinculados por una asociación estratégica desde hace tiempo en materia de seguridad, aunque varias crisis han salpicado las relaciones bilaterales desde su inicio.

Joe Biden visita este país el viernes por primera vez como presidente de Estados Unidos. Se reunirá con el príncipe heredero Mohamed Bin Salmán (MBS), dando vuelta a la página de la disputa que siguió al asesinato del periodista saudita Jamal Khashoggi.

La guerra en Ucrania elevó los precios del petróleo a niveles récord, y Washington quiere conseguir que Arabia Saudita aumente sus exportaciones.

Asociación desde 1945

El descubrimiento a finales de la década de 1930 de vastas reservas de petróleo bajo las arenas del desierto saudita convirtió al país en socio vital de Estados Unidos, ávido de oro negro.

El 14 de febrero de 1945, su asociación se selló en un encuentro histórico entre el rey Abdel Aziz Bin Saud y el presidente Franklin D. Roosevelt.

El pacto aseguraba al reino una protección militar contra un acceso privilegiado al petróleo.

Petróleo como arma

El 16 de octubre de 1973, diez días después del comienzo de la guerra árabe-israelí, los países árabes de la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) -liderados por Riad- hacen del petróleo un arma, aumentando su precio 70% e imponiendo un embargo petrolero (entre octubre de 1973 y marzo de 1974) a los estados que apoyaban a Israel, en particular a Estados Unidos.

Cooperación y atentados

Después de la invasión de Kuwait por el Irak de Saddam Hussein, en agosto de 1990, Arabia Saudita autoriza el despliegue de cientos de miles de militares estadounidenses en su territorio.

El país servirá de base a la coalición internacional, dirigida por Washington, que expulsa a las tropas iraquíes.

A partir de Kuwait, los aviones de la coalición despegarán para hacer respetar una "zona de exclusión aérea" sobre el sur de Irak, provocando la ira de los extremistas sauditas que llevan a cabo dos atentados antiestadounidenses en suelo saudita en los años 1990.

11 de septiembre

Después de los atentados del 11 de septiembre de 2001 en Estados Unidos, reivindicados por Al Qaida, las relaciones bilaterales experimentan un revés más grave. Quince de los 19 pilotos que secuestraron los aviones y provocaron la muerte de unas 3,000 personas eran sauditas.

Se acusa al reino de financiar en secreto el extremismo islamista. Washington transfiere a Catar el cuartel general de sus fuerzas aéreas en el Golfo.

Crisis bajo Obama

En octubre de 2013, Arabia Saudita anuncia su negativa a formar parte del Consejo de Seguridad de la ONU para protestar contra la inacción del Consejo, pero también de Washington, ante la guerra en Siria.

Arabia Saudita, que apoya la rebelión contra el presidente Bashar al Assad, no oculta su cólera después de que el presidente Barack Obama renuncia en septiembre a los ataques contra el régimen sirio.

El acuerdo nuclear alcanzado en 2015 con Irán, su gran rival, socava aún más la confianza de Riad.

Apoyo bajo Trump

Arabia Saudita saluda la llegada al poder de Donald Trump, recibido con fasto en mayo de 2017 en su primer viaje presidencial al extranjero.

Trump llama a "aislar" al Irán chiíta. Riad y Washington anuncian mega-contratos que superan los 380,000 millones de dólares, de los cuales 110,000 millones serán para ventas de armas estadounidenses al reino.

Tras el asesinato del periodista Jamal Khashoggi en octubre de 2018, Trump no descarta que el príncipe heredero Mohamed Bin Salmán estuviera al corriente. Pero "Estados Unidos tiene la intención de seguir siendo un socio inquebrantable de Arabia Saudita", afirma.

La "recalibración" de Biden

Poco después de instalarse en la Casa Blanca, a finales de enero de 2021, Biden llama a poner fin a la guerra en Yemen e interrumpe las ventas de armas a la coalición liderada por Riad.

El 12 de febrero, Washington retira a los rebeldes yemeníes, apoyados por Irán, de su lista de "organizaciones terroristas".

El 26, el informe de la inteligencia estadounidense sobre el asesinato de Khashoggi se hace pública. Acusa al príncipe heredero de haber "validado" el asesinato, lo que Arabia niega.

La Casa Blanca indica que Joe Biden quiere "recalibrar" la relación con Riad y se comunicará con el rey Salmán, en lugar de MBS.

"Contrarrestar a Rusia"

A principios de junio de 2022, Biden admite considerar la posibilidad de viajar a Arabia Saudita, país al que había prometido tratar como "paria" durante su campaña.

Acusado de cambiar de posición, justifica su desplazamiento el 10 de julio por la necesidad de "contrarrestar a Rusia" y de garantizar una "mayor estabilidad" en Medio Oriente.