Avioneta sobrevuela casa de vacaciones de Biden en Delaware
La Casa Blanca aseguró que no había ninguna amenaza para Biden o su familia.
El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, baja las escaleras del Air Force One en la Base Aérea de Dover, Delaware, el jueves 2 de junio de 2022, mientras se dirige a Rehobeth Beach, Delaware, para pasar el fin de semana. (AP Foto/Susan Walsh)
Una avioneta privada entró por error en el espacio aéreo restringido cerca de la casa de vacaciones del presidente estadounidense Joe Biden en Delaware, lo que provocó que el mandatario y la primera dama fueran evacuados brevemente el sábado, informaron la Casa Blanca y el Servicio Secreto de Estados Unidos.
La Casa Blanca aseguró que no había ninguna amenaza para Biden o su familia y que se habían tomado medidas de precaución. Tras evaluar la situación, Biden y su esposa, Jill, regresaron a su residencia de Rehoboth Beach.
En un comunicado, el Servicio Secreto afirmó que la avioneta fue escoltada de inmediato desde el espacio aéreo restringido tras “entrar por error en una zona segura”. La agencia indicó que entrevistará al piloto que, según una investigación preliminar, no estaba en el canal de radio correcto y no seguía el plan de vuelo publicado.
Como es habitual en los viajes presidenciales fuera de Washington, la Administración Federal de Aviación publicó a principios de esta semana las restricciones de vuelo antes de la visita de Biden a la playa. Las restricciones incluyen una zona de exclusión aérea de 16 kilómetros (10 millas) contenida en una zona restringida de 48 kilómetros (30 millas).
Un reportero de CBS News indicó en Twitter que vio a Biden dirigirse en caravana hacia una estación de bomberos en Rehoboth Beach. El grupo de reporteros que viaja con el presidente no formaba parte de dicha caravana.
El reglamento federal exige a los pilotos que revisen las restricciones de vuelo en su ruta antes de despegar. Aun así, las violaciones accidentales del espacio aéreo, sobre todo alrededor de las zonas restringidas temporalmente, son habituales.
Los aviones militares y los helicópteros de la Guardia Costera estadounidense se utilizan a menudo para interceptar cualquier avión que infrinja las restricciones de vuelo cercanas al presidente.